Las labores de búsqueda del piloto del avión antiincendios forestales desaparecido en la provincia de Zamora continúan por tierra tras resultar infructuosas las tareas llevadas a cabo hasta ahora en Zamora, Ourense, León y el límite con Portugal.
En declaraciones a los medios, el subdelegado del Gobierno en Ourense, Emilio González, ha lamentado la búsqueda "improductiva" de esta jornada debido a las "malas" condiciones meteorológicas y la escasa visibilidad, que impidió la salida de los medios aéreos durante toda la tarde para buscar la aeronave.
En concreto, se trata de un monoplaza Thrush 710P con matrícula EC-MXL, que volaba sobre las 11.35 horas desde la base de Doade a la de Córdoba, y que debido a las malas condiciones meteorológicas intentó volver, perdiéndose poco después su pista.
En ella viajaba un único ocupante, Santiago Durán, natural de Sevilla, casado y con dos hijos. A las 12.30 horas se tuvo la última noticia sobre él.
Más tarde, la Guardia Civil obtenía el permiso para utilizar la última localización del teléfono móvil del piloto, que ubicaba el avión en el triángulo formado entre las provincias de Zamora, Ourense y León.
Dentro del amplio dispositivo, además de la Guardia Civil, equipo Pegaso, con drones, participan GES de A Gudiña y brigadas de Medio Rural, con "más de 60 vehículos" además de helicópteros. También están preparados los equipos de montaña por si hubiese que acudir a zonas de difícil acceso.
Por el momento, "se peinó prácticamente toda la zona de la vertiente gallega hasta la frontera de Portugal" y se llevó a cabo, ha explicado el subdelegado, un "importante barrido" en el área que comprende el límite de las provincias de Ourense y Zamora, en las localidades de Hermisende, Lubián, Pías (en Zamora), así como Viana, A Canda y A Gudiña, en la provincia de Ourense.
El objetivo es "retomar mañana" la búsqueda. "Vamos a ver si la meteorología nos abre alguna ventana y podemos tener mañana al helicóptero", clave para localización de la avioneta, ha agregado el subdelegado.
Ya se han desplazado hasta Galicia parte de la familia del piloto, en concreto, su mujer, su padre y una hermana.
Las primeras hipótesis apuntan a que el piloto habría decidido regresar a la base de Doade cuando sobrevolaba Salamanca debido a las malas condiciones climatológicas, aunque la investigación está en manos ahora de la Policía Judicial.
