En un paraninfo de la UB completamente lleno de estudiantes, políticos, entre ellos el ex presidente catalán Pasqual Maragall, periodistas y actores y cantantes, la universidad barcelonesa acogió ayer el primer acto público en solidaridad con Garzón, en el que intervinieron el ex fiscal José María Mena, la escritora Rosa Regás y el filósofo Norbert Bilbeny.
Los cantantes Paco Ibáñez, Marina Rosell y Quico Pi de la Serra pusieron la nota de reivindicación musical a este acto, que hizo revivir a muchos de los asistentes tiempos pretéritos, cuando justamente había encierros en la universidad en demanda de libertad y justicia.
Al acto de Barcelona, organizado por una plataforma de ciudadanos a la que apoya la Generalitat, también asistió el ex fiscal anticorrupción Carlos Jiménez Villarejo, que participó el pasado día 13 en un acto de reconocimiento y apoyo al juez Baltasar Garzón organizado por UGT y CCOO en la Universidad Complutense de Madrid, cuyo rector, Carlos Berzosa, ha sido citado entre los agradecimientos.
José María Mena se mostró durante su intervención muy crítico con el Tribunal Supremo, que ha aceptado a trámite tres querellas contra Garzón, una de ellas por instruir una causa por los crímenes cometidos por el franquismo.
A su juicio, “escandaliza que se le impute a Garzón dilación en la instrucción de la causa, que le ocupó once meses durante los que le llegaron 17 denuncias de diferentes asociaciones, cuando el Constitucional está empantanado con el Estatut de Cataluña desde hace cuatro años”.
Por su parte, Rosa Regás dijo que el acto no se ha hecho sólo en solidaridad con Garzón sino para defender a las víctimas del franquismo y contra la supervivencia del mismo en las instituciones del Estado.