Podemos Jerez se presentará por primera vez con sus siglas a unas elecciones municipales. Lo hará con Manuel Guerrero como candidato y tras la frustrada negociación por la confluencia con IU y Ganemos. Guerrero, cuya trayectoria profesional ha estado vinculada desde joven al sector del comercio, ha sido presidente de la Asociación Provincial de Comerciantes Ambulantes y del colectivo vecinal Nueva Andalucía, del que fue fundador. Hasta la aparición de Podemos nunca había militado en un partido político, aunque reconoce que siempre tuvo el “gusanillo de la política y el sindicalismo en el cuerpo”, e incluso llegó a pertenecer a la CNT y, posteriormente, a la CGT. “Mi trayectoria en los movimientos sociales ha sido una constante en mi vida. Siempre he estado en muchas causas”, relata, pero es la primera vez que se sitúa en primera línea de la política.
“La confluencia no ha sido posible porque IU nos ha querido relegar a un papel irrelevante”¿Por qué se decidió por Podemos?
–Es una organización que parte del 15M, reivindicando una sociedad desde los de abajo. Siempre le he visto una trayectoria muy de clase obrera, que es lo que intentan llevar al Parlamento.
¿Cuándo se sumó al proyecto?
–En Podemos llevo participando desde los movimientos del 15M. La verdad es que nunca ha sido mi aspiración tener cargos relevantes en la organización, sino participar en las asambleas, apoyando. Estuve en Ganemos, que surgió porque Podemos era muy incipiente, no tenía configuración fuerte como partido municipalista. No dar aquel paso adelante entonces quizás fue un error, pero no había infraestructura organizativa como para hacerlo. Por eso se ideó la agrupación de electores, pero aquello al final no ha resultado como nosotros esperábamos.
Ahora, por primera vez, se presentan bajo sus siglas. ¿Cree en la importancia del valor de la marca?
–Creo que sí porque tenemos una masa importante de votantes y muchas veces se han encontrado perdidos a la hora de buscar nuestra papeleta, ya que no ha existido. Es importante que Podemos de una vez salga y se posicione. Una de nuestras propuestas de la coalición era que la marca Podemos saliera y se reforzara, porque es nuestra imagen y no diluirnos en otras marcas en las que no sabemos lo que hay dentro.
¿Qué le hizo dar el paso para presentarse a las primarias?
–Los propios compañeros me animaron. Muchos me conocen de muchos años, saben dónde me he posicionado. Conozco mucho a la sociedad jerezana. También formo parte del Ateneo, porque siempre me ha gustado mucho el tema de la cultura y la educación.
Cuando se dio a conocer su candidatura, todo quedaba pendiente de un posible acuerdo con otros partidos de izquierdas, pero la confluencia no ha sido posible. ¿A qué se debe?.
–Desde un primer momento hemos estado muy interesados en que exista en Jerez un proyecto político común, donde las organizaciones a la izquierda del PSOE nos entendiéramos, pero no ha sido posible. Hemos hecho llamamientos a trabajar juntos y no ha sido posible. IU nos dijo en septiembre que con nosotros no. Al cabo del mes nos dijeron que iniciáramos nuevas conversaciones, pero sobre todo por la apuesta de Ganemos de ir a tres, que es la que fuerza a IU a retomar el contacto. Pero el planteamiento fue incorrecto. Porque para empezar habría que haber valorado las opciones de cada candidato, el caudal político de cada formación, si habría que invitar a independientes. Eso no se produjo, porque IU Jerez imponía sus criterios, lo que nos condenaba a Podemos y Ganemos a un papel irrelevante. Así que negociaciones como tal no ha habido, porque se nos ha ninguneado. IU querían posición de control y dominio.
Y descartada la opción de IU, ¿no han intentado seguir adelante con Ganemos?
–Lo intentamos, pero al final se ha ido al traste, porque habíamos conseguido un acuerdo de participación al 50%, pero IU reapareció con otra oferta a Ganemos para ir juntos, con conversaciones a nuestras espaldas, y no ha habido más.
¿No le preocupa esta división en la izquierda con la derecha en pleno auge?
–Es muy triste, pero la realidad es ésa. Cuando llegue la hora de las elecciones y nos quedemos a x votos de conseguir concejales, que cada uno analice su responsabilidad, porque muchas veces la prepotencia de algunas organizaciones, y los vicios de la política de todos estos años en los sillones y no quererlos abandonar, afecta.
¿Por dónde van a pasar las líneas maestras de su programa electoral?
–Queremos incidir mucho en el tema de la vivienda, del comercio, el medio ambiente, en los barrios, darle más voz a los vecinos, aportar más iniciativas municipales por parte del Ayuntamiento a la hora de dar apoyo a esos mismos barrios y al comercio de esos barrios, ya que aquí se habla mucho del comercio del centro, pero el de los barrios está abandonado a su suerte y tienen muchas demandas.
¿Tienen líneas rojas de cara a posibles pactos?
–Creo que en política esas líneas rojas no existen, porque siempre se pueden llegar a determinados acuerdos y las líneas rojas lo que hacen es entorpecer. Nosotros tenemos apuesta de gobernar. Eso lo tenemos claro. No somos socios fáciles. Llevamos propuestas atrevidas. Tenemos una ciudad que es muy poco valiente. Hemos venido para hacer ruido, no para quedarnos callados.
Han desarrollado el proceso ‘Jerez escucha’, ¿qué han escuchado de los jerezanos?
–Si vamos por los barrios, todas las incidencias urbanísticas, los acerados, barrios deteriorados en los que no se han hecho inversiones durante mucho tiempo. Hemos hablado con vecinos con problemas de accesibilidad, hemos pasado por rincones olvidados de Jerez, ese Jerez oculto que no se ve.
¿Cuál es su modelo de ciudad?
–Queremos proyectar una ciudad que recupere la estabilidad industrial. Hay que hacer un esfuerzo muy grande para que la industria vuelva. No nos podemos basar solo en el turismo, aunque haya que seguir potenciándolo y desarrollándolo, pero no caer en la tentación de que el futuro de Jerez es solo turismo. En Jerez se necesitan además unas 5.000 viviendas sociales, porque la gente tiene muchos problemas para acceder a una vivienda. Jerez tiene también un potencial cultural que hay que poner en valor. Se está postulando a Jerez como candidata a capital cultural de la cultura pero hay mucho trabajo que hacer al respecto desde el Ayuntamiento, con la participación de todas las organizaciones.
¿Ven más opciones para ayudar a la creación de empleo?
–Hay que apostar por la creación de empleo en sectores como el agroalimentario, que está muy abandonado. En cualquier municipio hay mucha mayor iniciativa en el orden rural y aquí que tenemos una campiña tan importante hay poco tejido agroalimentario. Desde el mundo de la cultura, a través del flamenco, también se pueden desarrollar nuevas posibilidades para crear empleo.
Por su trayectoria, hace incidencia en el comercio, ¿creen que el Ayuntamiento debió actuar con más celeridad ante el decreto de ZGAT?
–Es una maniobra más de la Junta para legislar a favor de los de siempre, de los grandes distribuidores. No se piensa en el pequeño comercio. Jerez no tiene una gran afluencia turística como para que tengan que abrir los comercios en festivos, porque es irreal. El comercio de barrio y de proximidad se queda totalmente aislado, y se legisla para que unas grandes superficies acaparen mayor tiempo de apertura.
Se han mostrado muy firmes contra la instalación de renovables en las zonas de viñas, ¿cómo creen que se debe avanzar en materia de medio ambiente en Jerez?
–El medio ambiente lo componen muchas vertientes, y Jerez es una ciudad muy contaminada. Hay que combatir los humos en la ciudad, tener mucho mejor cuidados los parques. En cuanto a las renovables, está muy bien, y apostamos por ello, pero se debe regular su instalación, cuidar el entorno donde se montan, no destruir viñas, huertas, poniendo placas solares, alicatando el campo. Renovables sí, pero no así.
Se ha referido al tema del turismo, pero con respecto al centro histórico, ¿por dónde pasa su apuesta para evitar en el futuro fenómenos como el de la turistificación?
–El turismo viene a buscar vida a la ciudad, y la vida la hace posible la gente. El Ayuntamiento tiene que potenciar la construcción y rehabilitación de nuevas viviendas para el centro. Hay que hacer políticas más valientes a favor de la habitabilidad del centro, porque ese calor humano es fundamental para dar más vida al centro.
