El sindicato mayoritario de la Policía Local de Arcos, SPPME-A, alerta sobre la posible merma de la seguridad pública a raíz de sus desavenencias con el equipo de Gobierno de cara a la actualización del convenio laboral específico con esta parte de la plantilla municipal. De hecho, advierte que la delincuencia viene aumentando en la ciudad “azotando la localidad más que nunca”.
El sindicato, que se cuestiona el papel del alcalde Gambín en el terreno de la seguridad pública, considera que de forma reiterativa “se deja a la Policía Local por debajo de los efectivos permitidos en los turnos de trabajo”, y cita como ejemplo que hace unos días un servicio de patrulla estuvo configurado solo y exclusivamente por dos policías: uno en la Jefatura atendiendo el teléfono, las emergencias del 112 y a los detenidos en el depósito carcelario, y un segundo en la calle para atender a una población de más de 30.000 habitantes, asegura el sindicato. “Es lógico que los vecinos se sientan desprotegidos y tengan que hacer patrullas vecinales, pero no es justo para ellos”, señala la central sindical.
Respecto a sus demandas, el sindicato vuelve a exigir “condiciones laborales adecuadas, con la necesidad de realizar la valoración de cada puesto de trabajo que prometió el equipo de Gobierno y que no ha cumplido”, así como un reglamento de organización interno.
El sindicato pide al alcalde que “deje de manipular y no quiera ir de víctima”, y recuerda que son los policías quienes se juegan la vida en sus actuaciones. Por todo ello espera que se retomen las negociaciones y que fructifiquen en un acuerdo laboral que satisfaga las demandas planteadas.