Miguel Rodríguez Rodríguez es el candidato que da nuevos aires al proyecto político del Partido Popular (PP) en la escena arcense. Su perfil, su equipo humano y sus iniciativas para la ciudad parecen de momento estar procurándole gran popularidad, unido a que su rostro ya es familiar a la población tras la pegada de carteles y la instalación de la propaganda electoral. Con él analizamos el proyecto del PP y sus cábalas de cara a los comicios del 28M.
¿Cómo está viviendo en lo personal y familiar su participación por primera vez en una campaña electoral como candidato? ¿Está resultando ser como se la imaginaba?
–Afrontar la responsabilidad de ser candidato a la Alcaldía es bastante grande, con muchas horas de trabajo en la calle, en la sede, con los compañeros… Era algo que tocaba hacer y también admito que estoy disfrutando. Es cierto que se le quita tiempo a la familia, y más en mi caso que tengo una hija de solo cinco meses que requiere de muchas atenciones, pero también la suerte de contar con una esposa extraordinaria que me apoya y me ayuda como parte fundamental de este proyecto. Sin ella no podría estar en la calle trabajando.
No hace mucho tiempo confirmaba su militancia en el proyecto del PP después de que se viniera elucubrando al respecto. ¿Qué le ha hecho apostar realmente por el partido?
–Ha sido una transición natural. Fui delegado territorial de la Junta en Cádiz durante cuatro años, en el gobierno de Juanma Moreno y Juan Marín. En ese tiempo he trabajado codo con codo y he conocido cuál era el proyecto del PP, que me ha demostrado que es gente seria, responsable y que sabe lo que hace. He entendido que éste era mi sitio, con un proyecto serio con el que me siento identificado.
Otros candidatos de su partido en la provincia aseguran recoger el efecto de la política del presidente andaluz. ¿Es su caso también?
–La verdad es que el Gobierno de Juanma Moreno ha dejado mucha inversión en Arcos aunque otros digan lo contrario. Está demostrado. Como delegado territorial de Justicia que fui, digo con orgullo que traje a Arcos el cuarto juzgado de Primera Instancia e Instrucción, un equipamiento importante no solo para Arcos sino para toda la Sierra. También trajimos otras inversiones como el desagüe que se hizo junto al recinto ferial y en Jédula, además de toda la señalética turística que fue obra de este candidato. Había cinco millones de euros de los fondos de la ITI que no se podían quedar en un cajón y decidimos invertirlos en Arcos y la Sierra. Por eso digo que el efecto de Juanma Moreno ha tenido también su plasmación en Arcos.
¿Qué ambiente se ha encontrado en las filas del PP arcense y cómo ha sido la experiencia de configurar una lista humana en torno a su candidatura?
–Lo primero es estar agradecido porque se han acordado de mí para ser el candidato. Y muy agradecido por la acogida y recibimiento por la gente del partido y de mi cuidad. Me considero una persona de diálogo y que rehúsa de los conflictos. Hacer una lista electoral no es fácil porque hay que conjugar muchas variables, y tiene que resultar al final un proyecto que dé seguridad a los vecinos y vecinas de Arcos. El valor más grande que tiene este candidato es el equipo que le acompaña, formado por gente seria, formada, preparada y, lo más importante, que quiere a su ciudad. Considero que hemos resuelto con solvencia la configuración de la lista. Un equipo extraordinario del que me siento orgulloso. Hacer una lista electoral es una responsabilidad muy grande porque son las personas que pueden gobernar. Cuando buscaba los perfiles pensé en gente que iba a gobernar, personas que asumieran con responsabilidad las delegaciones.
¿Se han encontrado en ese proceso con el hastío general que parece existir hacia la política?
–No. De las personas que hemos tocado muy pocas han dicho no, y si lo han hecho ha sido por motivos laborales y personales. Algunos son conscientes ya de que si salen elegidos van a cobrar menos que en sus trabajos particulares, pero tienen claro el trabajo por Arcos.
Su mensaje en estas elecciones viene centrándose en la necesidad de “levantar Arcos”. Su lema electoral viene a decir que si no pone la ciudad en marcha, la gente se marcha. ¿Cómo se pone una ciudad en marcha según el PP?
–Ya lo he dicho, aquí hay que remangarse y ponerse a trabajar desde el minuto uno. Algunos compañeros se quejan de que están trabajando mucho en campaña, pero yo les digo que cuando gobernemos trabajarán el triple. Que se vayan preparando porque esto es el calentamiento. Lo primero que tenemos que hacer es atraer inversión. Hay empresas que quieren venir pero el Ayuntamiento les tiene que facilitar la tarea. Cito aquí el PGOU que permita nuevos proyectos y el crecimiento económico. El plan actual es de la época de Juan Manuel Armario y es el más antiguo de la provincia. En ocho años ni siquiera se ha hablado desde el equipo de Gobierno del PGOU y eso es un error. También tenemos que poner en marcha la segunda fase del polígono industrial El Peral, para crear suelo para que las empresas se puedan asentar en Arcos. Tengo contactos pero esas empresas tienen que contar con todos los parabienes. Por otro lado, tenemos un proyecto innovador que ayudará a que la inversión se quede en Arcos. Es la oficina del inversor, para que el Ayuntamiento sea la casa del inversor, un lugar para sus trámites y donde se le ayude en materia de subvenciones, etc. Si las empresas invierten aquí tendremos empleo de calidad, y ese empleo será el que evite que las familias tengan que ir a Servicios Sociales. La mejor política social es el empleo, pero para ello tenemos que ayudar a las empresas.
Su partido ha presentado más de medio centenar de propuestas en un proyecto que consideran realista y factible. ¿Cuáles son sus principales apuestas?
–Nos han dicho que nuestro programa es muy amplio, pero también Arcos lo es. El que gobierne va a tener que hacer muchas cosas que se han dejado de hacer. Por citar algunas medidas, creemos fundamental mejorar la seguridad pública, dotar a la plantilla de la nueva jefatura, ampliar la propia plantilla y acercar el servicio a más barriadas incluyendo las rurales que así nos lo demandan. Queremos crear el centro de coordinación de seguridad junto a otros cuerpos. Tenemos una ciudad extraordinaria, pero tenemos que ponerla en valor. Poner en valor, por ejemplo, nuestros senderos naturales porque son muchas las personas que nos visitan. Tenemos pueblos en la Sierra cuyos encantos turísticos son sus senderos. Creo importante crear parques caninos para que la ciudad esté más limpia, en particular los lugares donde juegan los niños.
El PP reclama más atención a las barriadas rurales, a las que dedicaría un tercio de la inversión del Programa de Fomento del Empleo Agrario (PFEA)…
–Nuestro programa electoral es el programa de los vecinos y vecinas, pues recogen sus demandas. Todas las barriadas coinciden en la falta de atención del Ayuntamiento. Se sienten vecinos de segunda. Es cierto que están más alejados, pero hay herramientas como el PFEA, un plan que lleva ocho años sin aparecer por las barriadas rurales. Nos comprometemos que un 30 por ciento del plan vaya a estas barriadas, para que arreglen sus caminos, acerados, etc. En cuanto a El Santiscal, tenemos medidas concretas, entre ellas atender la demanda de los padres y madres del colegio para solucionar las inundaciones, pues sus hijos soportan situaciones indignas. Hablamos de un tanque de tormentas para recoger las aguas que se podrían canalizar hasta el lago o utilizarlas para el baldeo y para el riego.
Ustedes se han mostrado críticos con el problema del agua potable. ¿Qué harían para mejorar su calidad y devolverla en óptimas condiciones a la población?
–Lo primero es hacer un diagnóstico. Hemos solicitado por escrito una reunión a Aqualia para conocer su opinión y las causas de esta situación. La empresa nos ha remitido al Ayuntamiento pero de momento no hemos tenido respuesta. No me importa decirlo, si soy alcalde dentro de dos semanas, lo primero que haré será encargar un diagnóstico, porque hay zonas más afectadas que otras y eso debe tener una explicación. Ese diagnóstico nos dirá si el acuífero está vacío y las acciones que se pueden hacer. Pero no se puede dejar pasar el tiempo como ha ocurrido en estos ochos años. Además, los vecinos beben agua turbia y pagan los mismos impuestos. Es cierto que es un problema difícil, pero resolver los problemas difíciles hace grandes a los gobiernos. Hay que mirar de frente al problema y solucionarlo porque para eso la gente nos vota. Opciones hay muchas, unirse a la red del Consorcio provincial de Agua, utilizar tal vez el acuífero de La Morla que al parecer dispone de agua, la posible utilización de la potabilizadora… Insisto, es fundamental hacer un diagnóstico y hacer nuevas catas. Hay que asesorarse técnicamente, pero mientras tanto no podemos conformarnos con beber barro.
Su programa apuesta por la accesibilidad. Explíquenos más por favor.
–Tenemos una ciudad muy bonita, pero muy complicado, con muchas cuestas y pendientes, acerados pequeños, etc. Tenemos un impresionante casco antiguo pero con problemas de accesibilidad. Nuestro plan se dirige a las personas mayores y a personas con movilidad reducida. Es importante para los vecinos y para quienes nos visitan. Un pueblo limpio y accesible es la mejor garantía que podemos ofrecer. El boca a boca es muy importante para el turismo. Y creo que es importante sensibilizarnos con la eliminación de barreras en edificios públicos, un ejemplo es la oficina de Turismo. Respecto al ‘Ciudad amable’, su problema ha sido la planificación desde el Gobierno municipal. Yo estoy de acuerdo, y creo que todo el pueblo, con que desaparezcan los coches de la plaza del Cabildo, pero no estamos de acuerdo con dejar a la gente tirada, dejarla sin aparcamiento sin que se haya puesto en marcha una alternativa. En nuestro programa llevamos la localización de nuevos aparcamientos. Los negocios de la zona están teniendo serias dificultades para recibir visitantes por las obras de la plaza del Cabildo. El PP, lo primero que haría, sería buscar nuevos aparcamientos y hacer lo necesario para que la plaza del Cabildo no pierda su esencia, es decir, sin utilizar elementos que no tienen nada que ver con el entorno (cristal, metacrilato, una fuente que nunca ha habido…). Hay que respetar el patrimonio.
¿Qué harían ustedes con La Verbena?
–Si entramos en el Ayuntamiento al día siguiente firmamos el convenio con la Junta. No voy a confrontar con este tema. Creo preciso zanjar ya el debate y firmar el convenio. Es un tema espinoso y desagradable para los vecinos. No se puede poner encima de la mesa las obras y el convenio de Diputación a unos meses de las elecciones. Cuando invirtió en las obras el Gobierno de España fue con un ministro del PP. La Junta lleva mucho tiempo con un millón y medio consignado. Lo mismo es que no quieren que la Junta ponga dinero en época electoral. No sé si el alcalde se ha leído o no el convenio, o quiere dar una información que no es la correcta. Pero de todas formas el Ayuntamiento lleva mucho tiempo abandonando a La Verbena, por ejemplo con la limpieza.
Llama la atención en su programa un proyecto de centro para personas mayores y con discapacidad… Háblenos también de su proyecto para la juventud.
–Me siento sensibilizado con las personas mayores, con las que tenemos que estar, para que tengan una vejez bonita. Tienen que recibir todo el cariño de las administraciones. Hay también personas con discapacidad que acaban solas en la vida cuando les faltan sus familiares, y la idea va por ahí… Respecto a los jóvenes, también necesitan más formación, recuperar escuelas taller para formar a la gente en albañilería, fontanería y otros oficios, para que se vayan a trabajar a empresas locales con formación. La juventud es la época más bonita de la vida y le tenemos que dar alternativas con ocio, deporte y cultura.
En cultura también ustedes parecen volcarse con el flamenco…
–Nos hemos reunido con casi todos los sectores, pero hay algunos como el flamenco que se queja de la pérdida de identidad. No podemos perder la identidad de la plaza del Cabildo pero tampoco la identidad del flamenco. Tenemos lo más importante: buenos cantaores, bailaores, guitarristas, escritores… A partir de ahí, y lo dicen ellos, necesitamos dar otra dimensión a la Velada de las Nieves, un cariz más cultural y apostar por nuevos artistas y nuevas actividades. También me preocupa mucho la saeta porque se está perdiendo. Tendremos que hacer algo para que recobre protagonismo.
Una reflexión para terminar.
–Creo que el cambio está cerca y que el PP llevará la iniciativa. El PP se presenta para ganar con mayoría. Si se da otro escenario, ya veremos, pero estamos convencidos del apoyo de los arcenses para poner Arcos en marcha.
