Las animaciones en las calles, con representaciones teatrales de diferentes compañías, programas para que los niños se eduquen jugando, sesiones de cine matinal y mucho teatro de mano de la compañía jienense La Paca, han sido el ejemplo de que en vacaciones las familias han tenido de qué disfrutar.
La promoción del olivo como árbol de Navidad marcó el acento jaenero de la Navidad y que los niños del Navas de Tolosa y el Santa Capilla de San Andrés salieran con sus compañeros de colegio a cantar el aguinaldo hizo que las tradiciones no se perdieran.
Los conciertos en los dos teatros de la ciudad, pero también los mercados de abastos, por ejemplo, y los de la Nochevieja del 31 de diciembre, con una despedida de año llena de recuerdos jienenses, han sido muy respaldados.
La Banda Municipal ha actuado con frecuencia esta Navidad y supo hacer de los villancicos, una música popular con la que incluso animar las compras en el Mercado de Peñamefécit y en el de San Francisco. El concierto de año nuevo con la soprano Alfonsi Marín, y el I Concierto de Reyes 'Estrella de Oriente' ha demostrado que el público es fiel a este tipo de actuaciones.
Jaén ha tenido ganas de Navidad y su gente la ha disfrutado además con su Cabalgata, poniendo así un broche final mágico a una programación heterogénea y para todos.