El número dos del mundo aprovechó los numerosos fallos de su adversario para sellar un cómodo triunfo por 6-1, 6-1 y 6-2 en un choque que solventó en dos horas y 27 minutos de un encuentro en el que no tuvo ni una sola bola de rotura en contra.
A pesar de lo abultado del resultado, Mónaco ofreció más resistencia de la que refleja el marcador en el primer set, en el que la tónica fueron los largos peloteos y la debilidad del saque del 'Pico', que sólo pudo salvar su primer servicio y superando dos bolas de 'break' en contra.
Esos primeros instantes reflejan la dinámica del encuentro. La irregularidad del argentino, que cometió 11 errores no forzados, permitió a Nadal ponerse en ventaja en el tercer juego y sumar seis consecutivos para llevarse la primera manga.
La presión hacía mella en el tandilense, que no era capaz de enderezar el rumbo pese a los gritos de aliento de la bulliciosa hinchada albiceleste, decidida a encender el ánimo en la grada. Así, el segundo parcial volvió a ser un monólogo del manacorí, que necesitó sólo cuatro juegos para quebrar el saque de Mónaco (3-1).
Ese 'break' volvió a ser determinante, Nadal sumó los siguientes tres juegos para poner un nuevo 6-1 en el electrónico y todo apuntaba a un nuevo recital del manacorí, invicto en tierra batida en Copa Davis.
NADAL, IMPACABLE.
A pesar de lo contundente del resultado, Mónaco mantuvo sus opciones hasta el quinto juego de la tercera manga. Después de tirarse al suelo para tratar de salvar una bola corta de Nadal, llegó el 'break' para el balear en la siguiente jugada, de las que hacen al público saltar de sus asientos ante la desesperación de la afición sudamericana.
El partido no tuvo más historia, Mónaco necesitó asistencia médica y terminó rindiéndose a la superioridad de Nadal, uno de sus mejores amigos del circuito, para encajar un nuevo 'break' en el séptimo juego que acerca un poco más la quinta 'Ensaladera' para España.
El segundo encuentro del día medirá al número dos español, David Ferrer, con el número uno argentino, Juan Martín del Potro, en un encuentro vital para los intereses albicelestes. El de Jávea ha ganado dos de los cuatro duelos contra el tandilense, pero nunca se han cruzado en tierra.