El Betis afronta su segundo derbi andaluz de la temporada después de tres días en los que el beticismo ha visto reflejado a su equipo en la clasificación junto a la élite del fútbol español.
Esta noche los verdiblancos recibirán a un Granada que en estos momentos ocupa puestos de descenso puesto que lleva sin lograr una victoria desde el 7 de octubre ante el Mallorca por 1-2 amén de atravesar ciertos problemas a nivel institucional que están afectando en el entorno del club nazarí.
Tirando de estadísticas en los enfrentamientos disputados en el Villamarín entre ambos conjuntos, la historia favorece a los locales. Hasta en nueve ocasiones se han visto las caras en Primera, con un balance de cinco victorias para los béticos, dos empates y dos choques en los que los visitantes se llevaron el gato al agua; curiosamente en las campañas 1942/43 y en la 2011/2012, primera y última vez que han confrontado sendas escuadras en territorio sevillano.
En lo que se refiere al partido, tanto Mel como Anquela tienen dudas en sus respectivas plantillas para elaborar la convocatoria definitiva de cara al choque este viernes. El técnico verdiblanco al igual que la pasada semana no facilitará la lista hasta que finalice el entrenamiento matutino de hoy, ya que quiere conocer el estado final del extremo Juan Carlos Pérez y el lateral Álex Martínez; pues tanto uno como otro salieron con diversas dolencias del partido del lunes. Salva Sevilla y Mario están pendientes aún de realizar una última prueba que certifique su presencia aunque no parece que ninguno de estos cuatro vaya a perderse el encuentro. De ser así, no se espera que varíe en demasía el once titular que Mel dispuso en el Coliseum frente al Getafe el lunes.
Anquela, que ya ha empezado a ser cuestionado por los malos resultados que el Granada está cosechando en estas diez primeras jornadas, tiene la baja segura de Diego Mainz y Guillerme Siqueira. El envite supondrá la vuelta de Iriney, algo que parte de la afición aún no perdona.
Oportunidad por tanto pintiparada para el Betis si finalmente no se atraganta con tanto ‘azúcar’ y se mantiene en Liga de Campeones.
