Una nueva forma de robar se ha extendido por los supermercados y centros comerciales en general y estaciones, por lo que se aconseja que no se deje nada en las taquillas que existen en este tipo de establecimientos.
Se han detectado casos de robos después de que los ladrones hayan metido una moneda en varias taquillas, llevarse la llave y hacer una copia de ellas.
Una vez que tienen las copias las numeran para saber a cuál pertenece, volviendo otra vez a la taquilla, dejando la original en la cerradura para recoger su moneda y se dedican a esperar.
Cuando alguien deposita bolsas de otra tienda o cualquier otra cosa que lleven en la misma taquilla y coinciden con los números de los duplicados que tienen, una vez que las víctimas entran en el centro comercial comienzan su trabajo.
El amigo de lo ajeno abre tranquilamente la taquilla con su copia de la llave y se lleva lo que haya dentro. Se trata de una práctica tan sencilla que se puede hacer en cualquier tipo de taquilla de cualquier centro o servicio.