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Alcalá la Real

Isidro Ibáñez: "La única fórmula que conozco es la del trabajo"

Recientemente la empresa Quesos Sierra Sur, de Ermita Nueva, ha cumplido 20 años, habiéndose ganado desde entonces un prestigio que no ha dejado de crecer; hoy conocemos mejor a su creador, Isidro Ibáñez

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  • Isidro Ibáñez. -

El pasado mes de marzo se cumplían veinte años de la creación de Quesos Sierra Sur, una empresa familiar que, a día de hoy, se ha convertido en un verdadero estandarte del sector alimentario en nuestra comarca y en exponente de la calidad de nuestros productos que ha sido reconocido en repetidas ocasiones, dentro y fuera de nuestras fronteras, con numerosos premios y reconocimientos. El alma de esta pequeña gran empresa es Isidro Ibáñez, con quien hoy conocemos más de cerca este verdadero símbolo de Ermita Nueva.

¿Cuál es la fórmula para crear una empresa con el prestigio del que hoy goza Quesos Sierra Sur?
–La única fórmula que conozco es la del trabajo. Horas y dedicación, por parte de mi mujer, yo, los empleados. Al principio, superando numerosos problemas, luego un poquito más desahogados, pero simplemente trabajar.

¿Cuáles diría que son las señas de identidad de Quesos Sierra Sur?
–Yo creo que es la calidad. Desde siempre hemos cuidado que la leche sea de primerísima calidad. Luego, hemos ido adaptándonos a lo que los clientes nos pedían, sacando nuevos productos, a base de pruebas, cursos, viajes, aprender cosas nuevas, para responder a lo que nos demandaban, pero la esencia es la calidad.


¿A qué mercados está llegando en la actualidad Quesos Sierra Sur?
–Esencialmente funcionamos en el mercado local y comarcal. A partir de ahí, abarcamos también las provincias de Granada y Jaén, fundamentalmente con el queso fresco, que es el más conocido, así como el semicurado. Al margen de esto, vendemos en algunos puntos concretos de Bilbao, Reus, Barcelona, Madrid,  e incluso en Alemania, pero esto último apenas supone entre un 10 y un 15% de las ventas. Es cierto que últimamente estamos comenzando a vender en establecimientos tipo gourmet en numerosos puntos de la geografía española, pero el grueso del negocio sigue siendo local.

¿Qué volumen de producción tiene la empresa?
–Bueno, la producción se mueve en torno al millón de litros de leche al año. Esto supone entre 3.000 y 3.500 litros de leche diarios, y una producción de entre 500 y 550 kilos de queso al día. La empresa cuenta con nueve empleados directos y un buen número también de empleados indirectos.

¿Cuáles cree que son los principales problemas a los que se enfrenta el sector?
–Uno de los problemas esenciales ahora mismo es la financiación. Pero no por parte de los bancos, sino en cuanto a la Administración. No tengo problemas con los bancos, me siguen prestando dinero. Pero, después de la subida del IVA, el precio de la leche ha subido, así como los costes en general, y sin embargo, el IVA del queso no ha subido, con lo cual, cada mes yo estoy financiando a la Administración con 6.000 ó 7.000 euros que, lógicamente, es el beneficio que genera la empresa y que se está yendo para la Administración, lo que hace necesarios unos préstamos que son difíciles de mantener. Este año, además, el precio de la leche ha subido mucho, pero los ganaderos no ganan nada porque también los precios han subido, pero el precio del queso no puede subirse, hay que mantenerlo en los precios del mercado. La conclusión es más trabajo y menos beneficios.

¿Y comercialmente está afectando la crisis?
–Bueno, tenemos un marco en el que el límite de expansión es el que yo le ponga, y el consumidor, claro está. Ahora mismo estamos funcionando al 80% de capacidad, y aun así el año pasado hemos aumentado las ventas en un 15%. Creo, no obstante, que he llegado a mi tope, puesto que producir más significaría también una mayor inversión. Se podría abrir mercado fuera, y vender en Francia, Alemania, etc. pero creo que tendrá que eso, en todo caso, corresponderá a mi hijo o las generaciones que vengan.

¿Qué cree que aporta una iniciativa como la Muestra de Quesos Artesanos que se celebra por segundo año en Alcalá?
–Es una manera de promocionar el queso, en general. Hay mucha gente aficionada al queso, existe una gran demanda de productos de calidad que no se encuentran en los mercados normales, y entonces la muestra es un escaparate para todo este sector. Luego, es un aliciente más para Alcalá.

¿Cree que hay futuro para el sector agroganadero en nuestra comarca?
–Yo creo que sí, pero las políticas comunitarias no están apoyando nada el sector primario en España. Están intentando deteriorar el sector primario, cuando debería ocurrir al contrario. Pero, por desgracia, en estos momentos, este sector es el último de la cadena. Ahora mismo es muy complicado el relevo generacional, un  ganadero tiene que vivir hoy en día dedicado prácticamente los 365 días del año a su trabajo, y después no ve una compensación, ya que la burocracia, el alza de los precios del alimento para el ganado, todo sube, pero el producto no compensa tanto trabajo. Estamos, en definitiva, sufriendo una política agraria que está dando lugar a que agricultores y ganaderos dejen las explotaciones y se vayan al paro. El sector necesita una política de ayudas que permita salvarlo.

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