El centro penitenciario de Botafuegos se distingue, entre otras cuestiones, por ser uno de los recintos carcelarios con más variedad de procedencia entre sus presos. Un total de 42 nacionalidades conviven en el penal, cuatro más de las que eran en marzo de 2012.
Según datos a los que ha tenido acceso este medio, en la actualidad hay 410 extranjeros en la cárcel algecireña del total de 1.542 reclusos que había a fecha del pasado 24 de septiembre, Día de la Merced, patrona de Instituciones Penitenciarias.
En cuanto a la comparación con el pasado año, las cifras se mantienen en términos parecidos, con un descenso moderado de 28 presos (1,78%) en términos globales, y cinco extranjeros menos que entonces.
Proporción
Aproximadamente el 73% de los internos de Botafuegos son españoles. El resto (27%) son de otras nacionalidades.
La gran mayoría (258) de estos extranjeros son marroquíes, comunidad seguida por los rumanos (21) y los británicos (19).
Otro colectivo con una población importante dentro de la prisión es Francia, que llega hasta los 16 reclusos, lo que supone un 3,90% del total.
A partir de ahí, la representación de cada país es casi testimonial, si bien un total de 42 nacionalidades cuenta con algún representante. Zimbabwe, Uruguay, Turquía, Sudán, Sierra Leona, Serbia, Senegal, Polonia, Mauritania, Mali, Macedonia, Kazajstan, Italia, Irlanda, Irak, Georgia, Gambia, Dinamarca y Brasil son los países que cuentan con un único representante en Botafuegos.
Colectivos estables
Dentro del centro penitenciario hay determinadas nacionalidades que, si bien no son mayoría en el recinto, representan comunidades más o menos consolidadas, con un número similar de presos en cada recuento.
Es el caso de países europeos como Francia, Alemania y Holanda. En el caso de los primeros, se quedan en los 16 que eran en 2012; la semana pasada se contabilizaban seis representantes, alemanes dos menos que en marzo de 2012. Holanda mantiene, en su caso, los siete que eran hace un año y medio,
La presencia de tal cantidad de nacionalidades obliga a que la integración sea una de las claves en el trabajo de reinserción efectuado desde el centro penitenciario algecireño.
Con frecuencia, los reclusos solicitan traslado a sus países de origen a través del cauce de la Subdirección General de Cooperación Internacional.
Marroquíes, británicos y rumanos, mayoría
Las tres comunidades más numerosas de la cárcel de Botafuegos (marroquíes, rumanos y británicos) suman el 72,68% del total de la población reclusa, según datos aportados por fuentes penitenciarias.
La estadística refleja que casi el 63% de los extranjeros de la cárcel algecireña y un 16,7% del total de reclusos son marroquíes. La mayor presencia de este colectivo radica en las numerosas detenciones relacionadas con tramas de narcotráfico e inmigración en las que están implicados miembros de esta nacionalidad.
En segundo lugar, están los rumanos, con 21 representantes, como muestra del importante número de miembros que esta comunidad tiene en la zona, y también como consecuencia de traslados procedentes de otras cárceles cercanas.
Por último, los británicos cuentan con 19 representantes. Gran parte de ellos son naturales de Gibraltar. Además, hay que tener en cuenta que la comunidad británica es muy numerosa, tanto en la comarca como en zonas aledañas, como la Costa del Sol.
Senegal, Portugal y Bélgica, descienden
Si bien gran parte de las nacionalidades más habituales del centro de Botafuegos han variado mínimamente sus números, caso de Rumanía (25 en marzo de 2012 por los 21 de septiembre de este año); o Gran Bretaña, que se queda con los 16 del año pasado, otros países han perdido gran parte de su representación en la cárcel algecireña, si no finalmente han desaparecido, incluso, de la estadística.
Así, uno de los casos más llamativos es el de Senegal, que tenía 11 representantes en marzo de 2012 y que, tan sólo año y medio después, se queda con únicamente cuatro. Algo parecido le ha pasado a Portugal, que de los diez que tenía en 2012 ha pasado a tener sólo cinco. Bélgica desciende también sensiblemente (de ocho a cuatro en año y medio).
Países como Estonia, Cuba, Luxemburgo, Siria, Ghana o Guinea-Conakry pierden su representación; mientras que otros como Rusia (3) Serbia o Mauritania (1) se incorporan a la lista.
La comunidad argelina, por contra, aumentó considerablemente, pasando a ser de ocho integrantes, frente a los dos con que contaban en marzo del pasado año, según los datos recabados.
