La Guardia Civil ha retirado un proyectil de la Guerra Civil que permanecía almacenado con la carga activa en una casa de la pedanía de San Bartolomé, en Orihuela, desde hacía 30 años.
El aviso lo dio la propietaria de la vivienda que pidió consejo a la Policía Local ante lo que, según el comunicado de prensa remitido desde el consistorio oriolano, era un objeto que encontró su padre durante una reforma de la vivienda hace 30 años, y sobre el que un vecino le había alertado de su peligrosidad.
Un equipo de desactivación de explosivos de la Guardia Civil comprobó que se trataba de un proyectil de los años 30 y que la carga estaba activa. La bomba fue envuelta en una carcasa de seguridad y retirada de la vivienda sin mayores consecuencias.