La consejera de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio, María Jesús Serrano, anunció el pasado lunes que su departamento tiene previsto licitar a lo largo del próximo mes de marzo las obras de sellado del vertedero de la Pitilla, lo que supondrá una inversión de 1,7 millones de euros, financiados a través de fondos europeos.
Serrano, que adelantó esta noticia tras el encuentro que mantuvo con el alcalde, Esteban Morales, en el transcurso de una visita institucional efectuada a la localidad, explicó que esta actuación permitirá regenerar una superficie de 86.343 metros cuadrados de terrenos afectados por vertidos de inertes, y generará cerca de 7.700 jornales. “Los trabajos que se van a llevar a cabo para eliminar estos vertidos, y que podrían comenzar a ejecutarse a finales de año, se centrarán en la limpieza y retirada de residuos voluminosos, estabilización física del vertedero, así como en el control de lixiviados, aguas superficiales y gases.
Asimismo, la eliminación de inertes incluirán también el saneamiento y la restauración ambiental de todo el entorno, en una actuación que permitirá un movimiento de 185.803 metros cúbicos de residuos”, afirmó la ex alcaldesa de Baena. Según Serrano, con el sellado de este vertedero de inertes, “se pretende solucionar los consiguientes problemas ambientales de contaminación (aguas subterráneas y superficiales, suelos ..), deterioro paisajístico, inestabilidad de taludes, saturación y posibles riesgos sanitarios, así como la restauración paisajística del todo el entorno”.
Tras reunirse con el alcalde, la consejera de Medio Ambiente quiso realizar una visita a la Central de Biomasa, una planta de valorización energética y subproductos del olivar, propiedad de Valoriza Energía, considerada actualmente como un referente internacional en tecnología de generación de electricidad a partir de biomasa.
Serrano recordó que en Andalucía existe una gran tradición de consumo de biomasa, debido principalmente a la existencia de industrias productoras de aceite de oliva y al sector agroalimentario, y en ese sentido apuntó que la biomasa es la renovable que más aporta al sistema energético andaluz, “no sólo para electricidad sino principalmente para usos térmicos, gracias al enorme potencial de los subproductos del olivar y restos forestales, de hecho, en la actualidad, el 57% del total de energía generada por biomasa en Andalucía proviene del olivar”.
La consejera también puso de manifiesto que el uso de esta energía limpia es clave para reducir el consumo de combustibles fósiles y con ello las emisiones de gases de efecto invernadero, diversificar y garantizar el suministro de energía y reducir la dependencia energética. La Central de Biomasa de Puente Genil, construida en 2006 por Valoriza Energía y Alvaro Espuny S.L, con un presupuesto de 46 millones de euros, se organiza en torno a tres empresas: Secaderos de Biomasa, S.A, (Sedebisa), Compañía Energética Pata de Mulo, S.L (Cepalo) y Biomasa Puente Genil, S.L.
La primera de ellas, la orujera, aporta el producto base (alperujo) y extrae hueso de aceituna y aceites de repaso o de extracción química del orujo graso seco (orujillo). La segunda, la de cogeneración para el secado, aporta el calor necesario para secar el alperujo y convertirlo en orujo graso seco, transformación indispensable para el extractado químico del aceite. Y la de Biomasa Puente Genil, S.L, la de generación eléctrica con biomasa, se encarga de la valorización energética de biomasa, y en concreto al aprovechamiento del orujillo (residuo procedente de la extracción del aceite de orujo de oliva).
