El presidente del comité de empresa de Navantia Puerto Real, Ramón Linares, indica que el encierro de 24 horas llevado a cabo por la plantilla del astillero ha transcurrido "con normalidad, pero también con la dureza propia de dormir en el suelo y estar encerrado una noche entera". Linares asegura que la plantilla "continuará movilizándose hasta que no haya carga de trabajo concreta y real, más allá de los anuncios a bombo y platillo".
En declaraciones a Europa Press, Linares destaca que con esta acción en concreto lo que pretenden los trabajadores del astillero puertorrealeño "es hacer presión ante la oportunidad de conseguir carga de trabajo para el mercado eólico marino, como es la construcción de una subestación para Iberdrola".
A juicio de Linares, lograr este contrato "es importante porque para astillero de Puerto Real supondría recuperar actividad y para industria auxiliar, recuperar empleo". En este sentido, precisa que el mercado eólico marino "va a ser de vital importancia para la Unión Europea (UE) en los próximos 15 años".
El representante de los trabajadores de la plantilla de Navantia Puerto Real sostiene que Iberdrola es "una gran empresa multinacional" pero manifiesta que "tiene que apostar por la industria de su país, y por otro lado Navantia tiene que ser más valiente en el concurso y apostar por el mercado eólico marino".
Por último, Linares estima "necesario que se intervenga políticamente en la economía, sobre todo con los datos de paro que hay en la provincia", y a este respecto afirma que "Junta y Gobierno deben hacer un esfuerzo para que ese contrato de Iberdrola se quede en Navantia y en la Bahía de Cádiz".
