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Córdoba

El acusado de violencia y maltrato a su mujer dice que \"nunca\" la ha tocado

Ella asegura que \"casi dos veces por semana\" le golpeaba y \"a diario\" la insultaba, en los últimos 15 años de relación

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El hombre acusado de delitos de violencia física y psíquica habitual, un delito de maltrato y otro de lesiones en el ámbito de la violencia de género durante unos 15 años hacia su mujer, quien no reclama por las lesiones causadas, ha declarado ante el juez que "nunca" la ha tocado, ni le ha hecho "nada malo", sino que tenían "discusiones como cualquier pareja".

   En el juicio, celebrado en el Juzgado de lo Penal número 2 de Córdoba y que ha quedado visto para sentencia, el procesado ha negado los hechos y ha defendido en todo momento que no ha amenazado, ni insultado, ni pegado a su mujer, con la que está en trámites de divorcio, tras estar casados cerca de 24 años y tener tres hijos en común.

   En este sentido, ha indicado que en abril de 2013 la mujer "cogió celos" después de que él pagara en un supermercado y mirara y hablara con la cajera, de manera que momentos después, según su relato, le insultó, a lo que ha añadido que en otro momento ella le dijo que "lo iba a dejar", al tiempo que él ha negado que la amenazara de muerte ante dicha decisión.

   Entretanto, comenta que "alguna vez" han tenido celos por parte de los dos, pero asegura que no la ha golpeado ni insultado. "Nunca me he puesto en contra de sus decisiones", ha subrayado el acusado, quien relata que él estaba tomando antidepresivos y ella un día lo amenazó diciéndole que si seguía con su trabajo de comerciante en el que trataba con mujeres se iba a arrepentir "de por vida".

   Tras ello, llegó a casa y se encontró con la Policía, que iba a detenerlo, por la denuncia de la mujer. No obstante, después él se presentó "voluntariamente" en la comisaría, porque, "no había hecho nada malo", ha defendido el hombre.

   Mientras, la mujer ha declarado que el acusado la ha insultado "muchas veces", al tiempo que ha citado algunos episodios y que no le dejaba ver a su familia. Además, ha asegurado que él era celoso y "casi dos veces por semana" la golpeaba y "a diario" la insultaba, en los últimos 15 años de relación.

   Al respecto, la mujer ha justificado que no denunciara antes los hechos de maltrato "por miedo", dado que, según ha apuntado, "estaba sin trabajo", con los hijos y "no tenía dónde ir", a lo que ha agregado que ella no es celosa.

   En concreto, la fiscal pide para el varón por estos hechos un total de cuatro años y seis meses de prisión y unos nueve años de orden de alejamiento. Según recoge su calificación inicial, desde hace unos 15 años el acusado supuestamente ha amenazado, insultado, vejado y golpeado a su mujer, incluso delante de sus hijos menores.

   También, relata que la ha obligado a comer en una mesa diferente a los demás miembros de la familia y le ha propinado empujones y codazos. Un mes antes de que naciese la segunda hija del matrimonio, el procesado "la cogió por el cuello" y la insultó, según el Ministerio Público.

   Igualmente, hace unos cuatro años la insultó en un mercadillo cuando estaba con la familia y al llegar a casa la obligó a comer en una mesa aparte y le prohibió a sus hijos que la llamaran mamá, aunque el fiscal apunta que "ambos hechos deberían considerarse legalmente prescritos".

   Por otra parte, hace un año y delante de los hijos menores, el acusado supuestamente le partió a su mujer un palo de cepillo en la espalda "con la intención de menoscabar su integridad física", si bien señala que no ha quedado acreditado que sufriera lesiones por este hecho.

   Además, indica que en abril de 2013, cuando la familia iba a comer, el procesado se sentó de espaldas a su mujer, quien le pidió explicaciones y el acusado se marchó del lugar al tiempo que la insultaba. Horas más tarde regresó a la vivienda e iniciaron una discusión, en la que el hombre supuestamente le dio tres puñetazos a la mujer y le tiró del pelo, "con "con la intención de menoscabar su integridad física", momento en el que intercedieron las hijas menores que estaban presentes.

   Como consecuencia de los hechos descritos, la mujer ha sufrido distintas lesiones en un hombro y un brazo, si bien no reclama por las mismas, según detalla el Ministerio Público.

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