La policía local Raquel Gago, imputada por el asesinato de la presidenta del PP de León, Isabel Carrasco, ha insistido hoy en su inocencia al manifestar que "pasaron muchas horas" desde el crimen hasta que encontró el arma en su coche.
"En ese tiempo podía haber tirado el arma, haberme deshecho de ella. No la vi y cuando lo hice llamé a la Policía", ha dicho en su declaración en audiencia pública ante el magistrado de la Audiencia Provincial de León a petición de su abogado.
El letrado de Gago confía en que este organismo judicial pueda concederle la libertad provisional que la jueza que instruye el caso, la titular del juzgado de instrucción número 4, ha denegado en tres ocasiones.
La acusada, que permanece en prisión desde el pasado 16 de mayo por su supuesta participación en los hechos, ha recordado que en su primera declaración tras su detención, Triana Martínez -encarcelada junto a su madre tras su detención por el crimen- la exculpó alegando que se produjo de forma casual el encuentro que al parecer pudo aprovechar para esconder el arma en el coche de la agente.
Raquel Gago ha afirmado que "se han dicho muchas cosas que no son ciertas", como que estaba en la calle, en actitud de espera, cuando se produjo el encuentro con Triana, como declaró un trabajador de la ORA.
A la declaración de Gago le ha precedido la de su abogado, la de los letrados de la acusación y la del fiscal.
El abogado defensor de la agente, Fermín Guerrero, ha asegurado ante el juez que durante la instrucción del caso "no se está teniendo en cuenta que Raquel es quien llama a la Policía y entrega el arma".
Ha opinado que no existen pruebas suficientes para mantenerla en prisión y ha agregado que, además, no existe riesgo de cometer obstrucción a la Justicia porque el caso está muy avanzado; ni de fuga, puesto que la acusada tiene en León arraigo familiar y laboral.
Los abogados de la acusación particular y el fiscal han alegado a este respecto que "a más delito, más posibilidad de fuga" y que Gago solo tiene en León a sus progenitores y no familia propia, al igual que carece de intereses laborales importantes.
Guerrero ha reiterado que Gago no comunicó que se había encontrado con Triana Martínez hasta que encontró el arma porque "entró en situación de bloqueo cuando un compañero le dijo que su amiga había sido detenida por algo tan grave".
El abogado defensor, que se ha mostrado convencido en declaraciones a los periodistas de que la Audiencia Provincial concederá la libertad provisional a su defendida, ha agregado ante el juez que "si Raquel hubiera participado en los hechos, no habría actuado de forma tan torpe", no habría quedado con ellas en días anteriores ni habría dejado de informar de su encuentro casual el propio día de autos.
La de hoy es la cuarta declaración de Gago ante el juez, después de haber comparecido en tres ocasiones ante la instructora del caso.
Isabel Carrasco murió tras recibir varios tiros el pasado 12 de mayo cuando se dirigía a la sede del PP en el Paseo de Salamanca.
La Policía detuvo veinte minutos después a María Montserrat González y a su hija, Monserrat Triana Martínez como supuestas autoras, mientras que 48 horas después entró en liza la tercera imputada, Raquel Gago, una agente de Policía Local amiga de Triana, que entregó personalmente en la Comisaría el arma homicida y explicó que la había encontrado en su coche.
