La supuesta víctima de un secuestro exprés en Granada a cambio de un rescate de 15.000 euros no ha reconocido este miércoles a los acusados en el juicio que se sigue por este asunto en la Audiencia Provincial de Granada y ha asegurado que los identificó en comisaría, tras interponer una denuncia por el robo de su coche, por las "presiones" de la Policía Nacional.
Los que se sientan en el banquillo de los acusados son Anastasio M.J., de 22 años; Job M.G., de 22 años; Juan A.G.M., de 27 años; José R.M.G., de 30 años; y Andrés J.M.H., de 31, Anastasio M.M., de 48 años, a los que la Fiscalía les reclama penas de entre dos y doce años y medio de prisión por delitos de secuestro, contra la salud pública y tenencia ilícita de armas.
En el segundo día de la vista, la supuesta víctima, que actualmente se encuentra preso, ha explicado que el día de los hechos, el 10 de febrero de 2012, ya de madrugada y cuando se dirigía a su casa, en la zona norte de Granada, cuatro individuos encapuchados le abordaron en la calle y le obligaron a que les entregara el coche, a lo que él se negó.
Por ello, lo metieron por la fuerza en el vehículo y emprendieron la marcha, sin que en ningún momento, según ha afirmado, les pudiera ver la cara. Tras unos 10 minutos de trayecto, llegaron a una zona de descampado en Alfacar y allí le obligaron a entregarle 15.000 euros a cambio de devolverle el coche.
Por eso, este empresario dedicado normalmente a la compraventa de vehículos llamó a su mujer y le dijo que dejara 15.000 euros en su propio vehículo, que encontraría estacionado en las inmediaciones de su vivienda, lo que ésta hizo. Sin embargo, después de abonar la cantidad, los individuos, según ha explicado, uno de ellos con acento marroquí, lo dejaron en Jun y se marcharon robando su coche.
Cuando se dirigió días después a poner la denuncia por el robo del vehículo, y no por el secuestro, y tras "insistir mucho la Policía", que ha afirmado que le dijo que tenía identificados "al 90 por ciento" a tres de los responsables, él puso su firma junto a las fotografías, tres de los procesados, aunque no sabía quiénes eran. "Cuando la Policía me dijo que sabía al 90 por ciento quiénes eran, yo firmé a los que me señalaron, después de muchas presiones y preguntas", ha incidido.
Por su parte, el jefe de grupo de la Brigada de Atracos ha explicado el proceso que llevó a los agentes de la Policía Nacional a dar con los procesados. Tras la primera denuncia de la víctima, los policías, según ha indicado, iniciaron gestiones para localizar el vehículo robado, que finalmente hallaron en un garaje de la zona norte meses más tarde, concretamente el 9 de abril.
Descubrieron que el coche había sido utilizado para cometer dos atracos, uno en un salón de juegos de Albolote y otro en una tienda de Atarfe, y un recibo de repostaje de gasolina que se encontraba en su interior les llevó a descubrir el caso similar de otro empresario árabe, al que habían secuestrado e incluso amenazado por el método de la "ruleta rusa".
Las investigaciones policiales llevaron a solicitar la entrada y registro en cinco domicilios de la zona norte, los de los procesados, donde se descubrieron las llaves del vehículo robado, la documentación del garaje en el que había sido encontrado, además de numerosas armas y hachís y plantaciones de marihuana. Asimismo, realizados los controles de los teléfonos móviles de tres de los procesados, los tres identificados por la víctima --tras varios días "temeroso" por lo que pudiera pasarle, según el testigo--, se llegó a la conclusión de que habían sido utilizados a la misma hora y en los mismos lugares en los que el presuntamente secuestrado había estado con sus captores el día de los hechos.
El juicio continuará este jueves, con la lectura de conclusiones e informes finales de las partes personadas, tras lo que quedará previsiblemente visto para sentencia.
ACUSACIÓN DE LA FISCALÍA
Según consta en el escrito de acusación del Ministerio Público, al que ha tenido acceso Europa Press, los hechos se remontan a la madrugada del 10 de febrero de 2012, sobre las 1,20 horas, cuando tres de los procesados (Anastasio M.J., Job M.G., y Juan A.G.M.), y otra persona que no ha sido identificada, encapuchados y con una pistola y dos navajas, abordaron a un hombre cuando se disponía a aparcar su coche en la calle Fray Juan Sánchez Cotán, en la zona norte de Granada.
Le golpearon para atarlo e introducirlo en la parte trasera del vehículo y así lo trasladaron a una casa abandonada en Alfacar. En ella le amenazaron con matarlo si no le entregaba una suma de dinero y, a tal fin, la víctima llamó a su esposa a las 2,30 horas pidiéndole que llevara 15.000 euros a las inmediaciones de su domicilio. Tras esa petición, la mujer dejó el dinero en el coche de su marido, que uno de los acusados había estacionado allí con las puertas abiertas para ello.
Recibido el dinero y tras dos horas de retención, los acusados dejaron al hombre, que sufrió policontusiones y varios golpes en la cara, en libertad en las cercanías de la localidad de Jun, y se llevaron su coche, con el que circularon hasta que el 9 de abril fue encontrado en la calle Tete Montoliú. La víctima no reclama ni por el coche robado ni por las lesiones sufridas.
Por otra parte, y como quiera que en la investigación de los hechos se sospechó que en los domicilios de los acusados se podría estar traficando con droga, el Juzgado de Instrucción 5 de Granada autorizó entrada y registro de las viviendas, en las calles José Miranda Serrano y Sor Barranco de Granada, donde se encontraron una escopeta semitautomática, y otra recortada, un revólver, munición, dinero en metálico, hachís, y una plantación con casi 200 ejemplares de marihuana.
La Fiscalía pide además a los seis procesados, que se enfrentan a distintas penas, el pago de multas que van desde los 1.067 euros a los 13.440 euros.