Miles de tractores y agricultores de toda Europa se dirigen a Bruselas desde distintos puntos de Bélgica para protestar por la bajada del precio de la leche, el mismo día que los ministros europeos de Agricultura celebran un Consejo extraordinario para buscar soluciones a la crisis agroalimentaria.
Las protestas han causado fuertes perturbaciones del tráfico en todo el país desde primera hora de la mañana, con 200 kilómetros de retenciones, informa el diario "Le Soir".
Los primeros tractores ya habían llegado a la capital belga a las 06:00 GMT y se concentraban en los alrededores de la estación de trenes del Norte, según la policía de Bruselas.
Otra columna de 200 vehículos agrícolas avanzaban hacia la ciudad en una fila de unos 5 kilómetros de longitud por la autopista E40, así como otras decenas de tractores lo hacían por otras vías.
Las estaciones de metro más próximas al barrio europeo, Schuman y Maelbeek, donde se reúnen los ministros y donde se espera que confluyan los manifestantes al final de la mañana, permanecerán cerradas o con acceso restringido, así como las vías próximas a este área que estarán cortadas a la circulación.
El objetivo de la protesta es denunciar la situación sin precedentes que afecta además de al sector de la leche, al de la carne de cerdo y vacuno y las frutas y verduras, para los que los precios están por debajo de los costes de producción en muchos países.
En la reunión de los ministros se espera que la Comisión Europea presente un "paquete de propuestas" para responder a la crisis, que a continuación serán debatidas por los países, indicaron fuentes europeas.
Luxemburgo, que preside la UE este semestre, ha elaborado de cara a esa cita un documento, al que ha tenido acceso Efe, en el que se menciona la posibilidad de ayudar al sector haciendo uso de parte del dinero recaudado en la última campaña con la llamada "supertasa", que pagaron los productores que superaron las cuotas lácteas (suprimidas desde el pasado 31 de marzo).
Esa multa, que podría alcanzar los 900 millones de euros según fuentes del sector, será devuelta al presupuesto de la UE, que después decidirá el uso a dar a esos fondos.