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Marbella

La Policía detiene a cuatro peligrosos asesinos y atracadores franceses

La Policía Nacional, en una operación conjunta con la Gendarmería francesa y la Policía Judicial de Toulouse, ha detenido a cuatro peligrosos delincuentes franceses que se ocultaban en un domicilio de Marbella.

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La Policía Nacional, en una operación conjunta con la Gendarmería francesa y la Policía Judicial de Toulouse, ha detenido a cuatro peligrosos delincuentes franceses que se ocultaban en un domicilio de Marbella.

   Los detenidos estaban reclamados por la justicia francesa por secuestrar a un acaudalado empresario en su país de origen, y por participar en un atraco a una armería en Carmaux (Francia), cometido con armas de fuego y uno de ellos se había fugado de prisión cuando cumplía cadena perpetua por homicidio y atraco.

   Un quinto sujeto relacionado con el atraco en la armería fue arrestado de forma paralela por los agentes galos en Toulouse. Los detenidos tenían en común haber disparado en alguna ocasión a un policía o gendarme, se habían conocido en prisión por sus largas condenas por atraco y homicidio y eran delincuentes veteranos, todo ellos de entre 45 y 57 años.

   Los arrestados secuestraron el pasado 22 de mayo a un empresario francés en el sur de Francia. Los captores utilizaron el vehículo de la víctima para trasladarse hasta la localidad de Platja d'Aro (Girona), donde se alojaron en una vivienda propiedad del secuestrado, que durante su estancia permaneció encadenado en el sótano y fue obligado a desvelar sus claves bancarias, a abrir cuentas en el extranjero y a realizar compras en Internet, entre las que destaca la adquisición en Bélgica de oro valorado en un millón de euros.

   Finalmente, se trasladaron a San Pedro Alcántara, en Marbella, donde se alojaron en un piso alquilado por los secuestradores. La víctima fue liberada el 13 de julio y pudo regresar a su domicilio tras haber sido obligado a pagar 100.000 euros semanalmente. Además, controlaron sus comunicaciones para detectar si denunciaba los hechos y le tuvieron localizado en todo momento.

   Tres días antes del secuestro, dos de los detenidos entraron en una armería de la ciudad de Carmaux, en la que, con el pretexto de adquirir una escopeta de acción de bombeo, encañonaron al dependiente llevándose el arma.

   Cuando iniciaban la huida en un vehículo, sorprendieron a una patrulla de policía que se dirigía al atraco, a los que apuntaron con sus armas, intentando posteriormente estrangular a un agente a la que arrebataron su pistola reglamentaria.

   El otro agente recibió un impacto de bala en el muslo durante un intercambio de disparos con los atracadores. Posteriormente, los autores se dieron a la fuga en un vehículo que robaron a punta de pistola.
IDENTIDADES FALSAS

   En España se iniciaron las investigaciones cuando Francia comunicó la tramitación de una Comisión Rogatoria Internacional, e informó de la posible presencia en el país de estos delincuentes. Las primeras pesquisas policiales permitieron descubrir las identidades falsas utilizadas en España por los fugitivos y determinar además la zona en la que pudieran estar residiendo.

   Una vez localizado el domicilio en el que se ocultaban, el Grupo Especial de Operaciones (GEO) preparó el asalto al mismo gracias al que los agentes pudieron acceder la vivienda de madrugada.

   La rápida intervención del GEO impidió que uno de los moradores tuviera tiempo de coger el arma que ocultaba bajo su cama en una bolsa. Paralelamente al arresto de estos cuatro individuos fue arrestado un quinto sujeto relacionado con los hechos en Toulouse por parte de la Gendarmería.

   En el registro del inmueble se han incautado numerosas armas de fuego así como 56 lingotes de oro de distinto peso --valorados en 10.000 euros cada uno--, 440 monedas de oro de distinto valor, 90.000 euros, documentación e información de las cuentas de la víctima y propiedades que consiguieron por el secuestro.

   Además, distintos tipos de dispositivos de vigilancia y multitud de teléfonos, tarjetas de memoria, discos duros e impresoras y material tecnológico para cometer futuros atracos o secuestros.

   La investigación, que continúa abierta, ha sido desarrollada por agentes de la Sección de Secuestros y Extorsiones del Grupo de Fugitivos Internacionales y el GOAS --todos ellos adscritos a la Comisaría General de Policía Judicial--, de la Udyco-Costa del Sol-Marbella, del GEO de la Policía Nacional y de la Gendarmería y la Policía Nacional francesa.

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