Grupos parlamentarios de la oposición están planteando la posibilidad de convocar en abril una sesión de control al Gobierno en el Pleno del Congreso para dejar en evidencia al Ejecutivo en funciones y poner de manifiesto, con el banco azul vacío, su negativa a ser examinado por el Parlamento surgido de las elecciones del 20 de diciembre.
En la Junta de Portavoces prevista para el próximo martes se decidirá el orden del día de la sesión plenaria de la semana del 5 al 7 de abril y ahí podría plantearse la convocatoria de este Pleno de control al Gobierno, según indicaron a Europa Press fuentes de los principales grupos parlamentarios de la oposición.
El Gobierno del PP reafirmó ante el presidente del Congreso, Patxi López, su negativa a someterse al control parlamentario al considerarlo legalmente inadecuado y las fuerzas de la oposición registraron el pasado miércoles un escrito para poner en marcha el procedimiento que llevará este asunto ante el Tribunal Constitucional.
Pero, con independencia del debate de esa iniciativa, previsto para el 5 de abril, y sabiendo que el TC tardará más de dos meses en resolver la cuestión, el PSOE y otros grupos parlamentarios están barajando la posibilidad de incluir una sesión de control al Gobierno en el Pleno de la Cámara.
PREGUNTAS A UN ESCAÑO AZUL VACÍO
Se trataría de forzar al Ejecutivo a tener que decidir si accede a responder las preguntas de la oposición o bien declina asistir a la sesión plenaria, lo que provocaría una imagen de diputados de la oposición haciendo preguntas ante los escaños vacíos del banco azul.
De momento, ese 'plante' ya se ha dio en la Comisión de Defensa, donde estaba citado el ministro Pedro Morenés y no acudió, siguiendo los criterios de Moncloa. La siguiente ministra con fecha de comparecencia es la titular de Fomento, Ana Pastor, convocada en la comisión correspondiente para el 5 de abril.
En la Junta de Portavoces del martes se tratará otro asunto conflictivo, y es que PSOE, Ciudadanos y Podemos y otros partidos de la oposición quieren que sea el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, quien informe al Pleno del Congreso del último Consejo Europeo, en el que se aprobó el acuerdo con Turquía sobre los refugiados.
De momento, en Moncloa no lo ven necesario y recuerdan que ya hubo consenso en la comisión sobre la posición española ante el acuerdo sobre refugiados. De hecho, la oferta del Gobierno es que sea el mismo secretario de Estado que logró el acuerdo, Fernando Eguidazu, quien informe de los resultados de la Cumbre Europea.
¿PERO POR QUÉ LO HACE?
El vicesecretario general de Ciudadanos, José Manuel Villegas, no entiende el empecinamiento del Gobierno de Rajoy en negarse a someterse al control del Congreso mientras esté en funciones y considera que la única razón que explica esta decisión de "pisotear" los derechos del Parlamento es que el Ejecutivo del PP ya está "en campaña".
"No entiendo por qué se está fomentando desde el Gobierno este enfrentamiento institucional con el Parlamento con un tema que, además de ser legal, es de sentido común", confiesa Villegas en una entrevista a Europa Press.
Villegas está abierto a modificar la Ley del Gobierno para dejar claro que un Ejecutivo en funciones no puede escapar al control parlamentario, como ha propuesto ya el PNV, pero en todo caso recuerda que esa norma ya establece que "cualquier actuación del Gobierno está sometida al control del Congreso".
"No sé se si se puede decir más claro; igual se tiene que poner en mayúscula o hay que hacer algún tipo de cambio. Si finalmente se produce el conflicto habrá que ver qué se puede mejorar para evitar que esta situación se repita en un futuro", añade.
EL GOBIERNO DEBE SOMETERSE A LA LEGALIDAD
El portavoz de Compromís en la Cámara Baja, Joan Baldoví, es de la misma opinión, ya que cree que el Gobierno en funciones debe dar explicaciones a los "representantes legítimos" acerca de "todas aquellas decisiones que están afectando a la totalidad de los españoles".
En una entrevista con Europa Press, Baldoví se muestra partidario de forzar un pleno de control porque "a veces es bueno escenificar aquello a lo que los ciudadanos tienen derecho", pero también la "rebeldía de un gobierno que no quiere someterse a la legalidad" que otorga a los diputados el hecho de ser "representante de todos los ciudadanos".