Después de que el Ministerio de Fomento adjudicase en noviembre la transformación en autovía del tramo de la carretera N-IV comprendido entre Dos Hermanas y Los Palacios y Villafranca, anunciando para el 9 de diciembre el comienzo de sus obras, y en un contexto en el que las autoridades han fijado para esta semana el "impulso" del proyecto, el citado ministerio ha licitado de nuevo el contrato de "control y vigilancia de las obras", con previsión de abrir el 6 de septiembre las ofertas que se reciban.
Según la documentación recogida por Europa Press, este contrato de "control y vigilancia" de las obras de duplicación del tramo Dos Hermanas-Los Palacios de la antigua carretera N-IV salió a concurso en enero por 1,38 millones de euros, al objeto de abrir las ofertas en abril de este año y adjudicar los trabajos. Este contrato, no obstante, sale ahora de nuevo a licitación por algo más de 1,55 millones de euros, con la "apertura de ofertas" fijada para el 6 de septiembre de este año.
Este contrato sale otra vez a licitación, por cierto, después de que el alcalde de Los Palacios, Juan Manuel Valle (IP-IU), denunciase la paralización de las obras, dado que apenas se apreciaría actividad en los tajos de la N-IV pese a que el contrato en cuestión fue adjudicado el 4 de noviembre de 2015 y el Ministerio de Fomento anunciaba para el 9 de diciembre el comienzo de los trabajos.
FASE DE "ACTUACIONES PREVIAS"
El delegado del Gobierno en Andalucía, Antonio Sanz, respondía al punto que durante estos meses han sido acometidas las "actuaciones previas" al grueso de las obras, que según sus palabras arrancarían plenamente esta semana, una vez solventada una incidencia con la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG).
Hablamos del muy esperado proyecto de transformación en autovía de la antigua carretera N-IV, que conecta Cádiz y Sevilla y cuyo trazado corre paralelo al de la autovía de peaje AP-4, cuyos precios han experimentado un paulatino incremento durante los últimos años, marcados por la cruda crisis económica. La subida de precios de la autovía de peaje, en ese sentido, ha ido en paralelo a la saturación de la antigua carretera N-IV, cuya alta siniestralidad es ya conocida.
Esta carretera, de hecho, contabilizó sólo en 2014 tres accidentes con víctimas mortales y otros tantos sólo con heridos, toda vez que en 2015 se habrían contabilizado dos accidentes mortales con un saldo de tres fallecidos.
DESDE 2006
Aunque en 2006 nació un proyecto destinado a transformar en autovía o desdoblar la carretera, una idea para la cual incluso fueron redactados los correspondientes estudios informativos y proyectos técnicos, la iniciativa se desvaneció a cuenta de la catástrofe financiera sufrida por España.
Pero tras un intenso debate público y político, salpicado por los accidentes mortales en esta carretera, el Ministerio de Fomento reactivó por fin el desdoble de la carretera incluyendo en los Presupuestos Generales del Estado partidas para transformar en autovía el tramo Dos Hermanas-Los Palacios de la citada carretera.
El proyecto fue licitado em mayo de 2015 por 66,5 millones de euros y fue adjudicado por 43,66 millones, si bien sobre el mismo pesaba una resolución de la Confederación Hidrológica del Guadalquivir (CHG) que denegaba la autorización de las obras, dada la necesidad de que el tronco de la futura autovía y uno de sus caminos de servicio respeten "el gálibo libre mínimo de cinco metros y una anchura libre mínima a la coronación el Canal del Bajo Guadalquivir, para la circulación de vehículos de explotación y maquinaria de conservación".
Pero en un escrito fechado el 2 de septiembre y recogido por Europa Press, el secretario de Estado de Infraestructuras, Julio Gómez Pomar, exponía que pese al contenido de dicho documento, "el cumplimiento de las nuevas condiciones no supone un obstáculo que no pueda resolverse antes del inicio o durante la ejecución de las obras". Finalmente, el propio Antonio Sanz ha ceñido a una necesaria autorización de la CHG el comienzo del grueso de las obras.
