Ganemos denuncia "la triste realidad de la antigua fábrica de botellas en lo que concierne a su suelo, es decir, la culminación de un proceso económico al arbitrio de las multinacionales y la especulación inmobiliaria. Una sinrazón que, entre otros llamativos hechos, pasa por tener entre los más exóticos acreedores del Ayuntamiento de Jerez al Banco Nacional de Abu Dabhi".
Los actuales propietarios de la difunta fábrica de botellas, expone Ganemos, "son dos fondos buitres, siendo el principal de ellos la agencia americana Apollo Global Management, presidida por Leon Black".
Ganemos Jerez entiende que es un "sinsentido poner la normativa urbanística municipal al servicio de los intereses de las familias más ricas del mundo. El Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) es un documento vivo y flexible que debe procurar todo lo contrario: blindar los intereses de los jerezanos y jerezanas. Esta ciudad no puede premiar la deslocalización industrial y la pérdida de empleo con un último pelotazo urbanístico en los minutos de descuento".
Por ello, Ganemos va a pedir en el Pleno Municipal que el Delegado de Urbanismo, Paco Camas, facilite a todos los grupos políticos un informe sobre la situación urbanística de la finca de la fábrica de botellas y la propuesta de uso elaborada por Saint Gobain, así como la documentación relativa al convenio firmado con la empresa propietaria de los terrenos, para poder analizar toda la situación detenidamente y sacar conclusiones al respecto.
Ganemos Jerez tiene claro que hay que poner en marcha políticas materializables y locales, "redibujar el PGOU, repensar el modelo urbanístico de la ciudad para que el tejido industrial y económico permanezca aquí y no emigre al extranjero, a las manos de grandes especuladores".