La oficina del Defensor del Pueblo Andaluz ha instado a la Junta de Andalucía a que explique por qué ha negado un alquiler social a una joven vecina de Sevilla alegando que tiene un perro a pesar de haber cumplido todos los condicionantes desde que comenzó la tramitación en 2010.
La joven, Ana Camacho, ha explicado a Efe que el Defensor le ha contestado a su queja tras acudir a esta institución como último recurso, "y me ha dicho que la Junta no ha contestado en el plazo requerido, por lo que le van a volver a insistir para ello".
La protesta de la joven se une a recursos como el presentado por el Partido Animalista (PACMA), en el que pide a la Junta que modifique el punto en el que se reflejan "las condiciones para acceder a una vivienda de alquiler de la Junta de Andalucía a través de EPSA-AVRA, con respecto a la prohibición de tener perros".
Camacho ha señalado que cuando terminó la carrera y decidió emanciparse "con el tipo de trabajo que tenía si no era de Protección Oficial, poca cosa me podría permitir, por lo que eché los papeles para registrarme con demandante de vivienda tanto de alquiler cómo compra".
Sin embargo, tras cumplir con todos los trámites la vivienda le fue denegada, a pesar de haber sido seleccionada como demandante principal para acceder a un Alojamiento Protegido de Alquiler en Renta Básica.
El escrito de la Junta argumenta que los perros pueden ocasionar destrozos o molestias a los vecinos, lo que PACMA entiende que "son argumentos con poca base, ya que los destrozos o molestias que puedan causar los animales son responsabilidad de sus dueños, igual que los causados por los niños la responsabilidad es de sus padres, o las que uno mismo cause que serán su responsabilidad".
La vivienda solicitada le fue concedida en la calle Mata Carrizo de Sevilla, aunque con el matiz de que no podía tener un perro en la misma.