El exalcalde de la localidad malagueña de Alcaucín José Manuel Martín Alba, para el que la Fiscalía Anticorrupción solicita 226 años de cárcel en el caso 'Arcos', sobre la presunta corrupción urbanística en dicho municipio, ha asegurado que el fiscal piensa "que esto era otro Malaya y se ha equivocado", mostrándose convencido de que será absuelto.
En declaraciones a los periodistas, la salida de la primera sesión del juicio, que ha comenzado este lunes en la Sección Tercera de la Audiencia de Málaga y que se extenderá hasta septiembre de 2017, Martín Alba ha asegurado que "esto es un procedimiento de los muchos pueblos de la comarca en que se han hecho viviendas, está todo sembrado de viviendas".
"Tengo la conciencia tranquila, el fiscal ha cogido el caso 'Arcos' como 'un Malaya' y esto no es comparable con nada", ha insistido el exregidor, quien se ha mostrado convencido de que saldrá "totalmente" absuelto porque "si es verdad que hay justicia, eso va a quedar demostrado", apuntando que tiene "todo bien argumentado y cimentado, cosa que el fiscal no ha podido hacer".
El acusado ha lamentado la elevada acusación del fiscal; "me ha metido todo, ahí lo llevas y defiéndete como puedas", y se ha quejado de un "trato desigual" en los delitos de falsedad, por los que le piden 210 años, "cuando yo nunca he hecho un informe, porque no tengo estudios para eso". Ha asegurado que los hacía el entonces secretario, que está acusado y que se ha conformado con la acusación.
Al respecto, ha explicado que él "daba el visto bueno, simplemente, que era decir que el secretario era quien era y que estaba en el ejercicio de sus funciones". "Pero el fiscal le acusa por un delito por imprudencia, porque no era consciente de lo que firmaba y yo sí lo era. Una barbaridad como un templo", ha manifestado.
Ha asegurado que confiaba en los informes del secretario, apuntando: "que se agarren los alcaldes que firmaban el visto bueno, porque mañana entra un alcalde y tiene que estar firmando el visto bueno al otro día y si el secretario lo quiere engañar, lo engaña". Además, ha señalado que siempre pensó en la legalidad de las viviendas, "nunca nadie me dijo lo contrario"; apuntando que "era la práctica habitual y de hecho son legales porque las normas no fueron publicadas hasta 2010 y no eran eficaces".
Su abogado ha señalado que las perspectivas "son buenas" y que "más tarde o más temprano se tiene que desinflar el caso 'Arcos'", indicando que ha alegado 54 prescripciones relativas a hechos "que si fueran constitutivos de delito, que tampoco es el caso, se han cometido hace suficiente tiempo".
"Si es consciente de que han transcurrido los plazos de prescripción a qué viene intentar inflar tanto un escrito de acusación hasta el punto de pedir 226 años de prisión por unos hechos que a lo mejor no son tales", ha señalado el letrado en referencia a la Fiscalía, añadiendo que el exalcalde ha recibido imputaciones por once delitos "de los que no tenía conocimiento, ni se le ha tomado declaración".
