El portavoz parlamentario del PSE-EE, José Antonio Pastor, ha valorado los "acercamientos" con el PNV de cara a alcanzar un acuerdo, aunque ha reconocido que todavía hay "problemas objetivos encima de la mesa". No obstante, ha advertido de que "tampoco hay ninguna urgencia especial de los socialistas por entrar en ese gobierno".
En declaraciones a Radio Euskadi, recogidas por Europa Press, los parlamentarios vascos han analizado el estado de las negociaciones que mantienen PNV, PSE y EH Bildu de cara a la gobernabilidad del País Vasco.
Tras indicar que se han producido "acercamientos" entre PNV y PSE, Pastor ha advertido de que hay todavía "problemas objetivos encima de la mesa". "Estamos poniendo voluntad para que eso se produzca. Tendrá que ser a lo largo de la semana que viene. Los tiempos están tasados y tienen una fecha en el horizonte", ha añadido.
Por otro lado, ha remarcado que "lo importante" es hablar de contenidos concretos y de cómo garantizar los servicios públicos y el estado de bienestar, de cómo poner en marcha una política industrial que disminuya el desempleo y abordar retos como el final del terrorismo y el desarrollo del autogobierno.
"Es evidente que tenemos modelos distintos. Podemos tener un análisis compartido de lo que ha pasado estos años de autogobierno, de sus carencias, del blindaje de sus competencias, pero en el más allá es evidente que hay diferencias entre lo que plantea PNV y EH Bildu y cómo vemos nosotros la construcción de este país", ha afirmado.
Por ello, ha considerado que el asunto es si jeltzales y socialistas son capaces de llegar a un "punto de encuentro suficientemente razonable" para que ambos se sientan "cómodos".
"Es evidente que todavía no se ha producido y esperemos que se haga en los próximos días", ha expresado, para añadir que "tampoco hay ninguna urgencia especial de los socialistas por entrar en ese gobierno".
En este sentido, ha reconocido que este acuerdo es "probablemente" más complicado que los alcanzados en ayuntamientos o diputaciones, ya que en estos "no se plantean cuestiones como el modelo de encaje territorial con el resto de España o el futuro del autogobierno y se habla más de las cosas de comer". "Cuadrar esos dos temas de forma razonable es más complicado, pero pensamos que no es imposible", ha añadido.
Por último, ha indicado que la preocupación de EH Bildu es lo "identitario", cuestión que la coalición reviste con "un ropaje que dice que es progresista". "No tiene por qué serlo. Será progresista si en el país hay una mayoría que lo es. Lo español no es malo por ser español sino por tener un carácter conservador o progresista. No por poner txapela al marco vasco es más progresista que el español que lleva boina", ha finalizado.
