La Policía Nacional ha desarticulado una organización criminal compuesta por ciudadanos de los Países Bajos que se dedicaba al cultivo de marihuana en las provincias de Málaga, Sevilla y Murcia, con el fin de distribuir la droga por Europa, especialmente en Bélgica y Holanda.
La operación comenzó en el mes de diciembre y se ha prolongado hasta este mes de marzo, cuando se puso fin a la investigación con el arresto del último de los integrantes de la banda.
Una operación desarrollada a nivel nacional en cuatro fases diferenciadas
La investigación se llevó a cabo de manera coordinada por parte de los grupos de estupefacientes de las Brigadas de Policía Judicial de Alicante, Lorca y Fuengirola. Los agentes descubrieron las actividades ilícitas del entramado y pusieron en marcha un dispositivo con la finalidad de concretar las identidades de los responsables de cultivo y el tráfico de la droga, así como de los lugares de los que disponían los traficantes para poder llevar a cabo su actividad criminal.
Fruto de una serie de pesquisas policiales, los agentes lograron ubicar varios chalets en las provincias de Murcia, Málaga y Sevilla que utilizaron los narcotraficantes para establecer cuatro cultivos hidropónicos de marihuana con capacidad para cultivar cada uno de ellos más de 1.000 plantas de marihuana.
Los miembros del entramado residían tanto en las localidades de Los Palacios y El Palmar de Troya (Sevilla), como en la provincia de Málaga en los municipios de Torremolinos y Alahurín de la Torre.
Al llevar a cabo los registros se descubrió que también traficaban con hachís
A medida que se fueron llevando a cabo los registros domiciliarios se descubrió que además de traficar con marihuana, también lo hacían con hachís, pues la Policía incautó 160 kilos de esa sustancia a lo largo del operativo.
Finalmente a mediados del pasado mes de febrero se dio por finalizada la operación. Los agentes lograron desmantelar cuatro cultivos de marihuana en las localidades de Lorca (Murcia), Alahurín de la Torre (Málaga) y Puerto Lumbreras (Murcia), así como desarticular el entramado criminal con la detención de once de sus integrantes, evitando así el envío de grandes partidas de marihuana y hachís a Bélgica y Holanda.
La operación, incardinada en el marco de la lucha contra el tráfico de drogas, se ha saldado con la incautación de 113 kilos de cogollos de marihuana, casi 5.000 plantas de marihuana y 160 kilos de hachís.
Los detenidos, todos ellos nacionales de Holanda y Bélgica, fueron puestos a disposición de los Juzgados de Instrucción en funciones de Guardia de Lorca, Murcia, Málaga y Utrera.