El consejero vasco de Interior compareció junto al viceconsejero de Seguridad, Rafael Iturriaga, para hacer balance de la actuación de la Ertzaintza en las fiestas en el País Vasco este verano. La actuación de la Ertzaintza y del Departamento que dirige Ares estuvo marcada este verano por la decisión de evitar actos de enaltecimiento del terrorismo.
Rodolfo Ares hizo un balance “muy positivo” de la actuación de la Ertzaintza pero ha dicho que necesita “el apoyo de todos”.
Así, pidió a los ayuntamientos que, “además de seguir trabajando en la retirada de todo tipo de soportes que enaltecen al terrorismo u ofenden la memoria de las víctimas, revisen los criterios de concesión de licencias para impedir la apertura de txoznas o establecimientos pertenecientes a comparsas o cuadrillas que todos sabemos que están creadas para dar soporte social a ETA”.
También hizo un llamamiento “a esa parte de la ciudadanía que desgraciadamente se ha podido acostumbrar a la simbología etarra”, y les pidió “que no se dejen vencer por la resignación y la apatía y pasen de largo, y no entren en establecimientos que exhiban imágenes que enaltecen a los asesinos o los que amenazan a esta sociedad”.
Por su parte, Eusko Alkartasuna acusó ayer al departamento vasco de Interior de “meter en el mismo saco el enaltecimiento del terrorismo” y “legítimas reivindicaciones políticas” como el acercamiento de presos o el derecho de autodeterminación.
La secretaria de Comunicación de Eusko Alkartasuna, Ikerne Badiola, censuró que el departamento que dirige Rodolfo Ares haya aprovechado las fiestas de los pueblos para “ensayar la nueva política de gestos y propaganda” del Gobierno vasco.