El volumen de comercio exterior de China creció un 9,9 % interanual en los tres primeros trimestres del año y alcanzó en esos nueve meses los 22,28 billones de yuanes (3,2 billones de dólares, 2,7 billones de euros), informó hoy la Administración General de Aduanas.
Las importaciones chinas aumentaron un 14,1 % en cómputo interanual durante ese periodo, mientras que las exportaciones se incrementaron en un 6,5 %.
En el mismo lapso, China generó un superávit comercial de 1,44 billones de yuanes (155.400 millones de dólares, 133.700 millones de euros), lo que supone una reducción del 28,3 % frente al obtenido durante los tres primeros trimestres de 2017, detalló el organismo.
De enero a septiembre, las importaciones alcanzaron los 10,42 billones de yuanes (1,5 billones de dólares, 1,2 billones de euros), mientras que las exportaciones sumaron 11,86 billones de yuanes (1,72 billones de dólares, 1,4 billones de euros).
En esta partida destacó el aumento de las compras de petróleo crudo (un 5,9 %), gas natural (34 %), petróleo refinado (9,8 %) y cobre (16,1 %), mientras que se registraron leves bajadas en las importaciones de mineral de hierro (1,6 %) y semillas de soja (2 %).
Si se analizan los datos de septiembre de forma aislada, se observa un inesperado incremento de las exportaciones, del 14,5 % interanual, muy por encima del 9,8 % registrado en agosto y de las previsiones de la mayoría de los analistas.
Por otra parte, las importaciones registraron en septiembre una caída moderada del 14,3 % interanual frente al 19,9 % del mes anterior.
El portavoz del organismo, Li Kaiwen, destacó la sólida base que atesora el comercio exterior chino y aseguró que el impacto directo de las continuas fricciones comerciales entre Estados y China todavía es controlable.
"El desempeño del comercio exterior de China durante los tres primeros trimestres sienta una base sólida para la perspectiva comercial de todo el año, impulsado por el rápido crecimiento de las empresas privadas y la diversificación de los canales comerciales con más economías emergentes, como Rusia y Polonia", dijo Li.
Aunque los efectos de la guerra comercial aún no son visibles, Li advirtió de que el crecimiento del comercio de bienes globales continuará enfrentando desafíos debido a las fricciones comerciales y a la inestabilidad "causada por una serie de incertidumbres macroeconómicas a nivel global".