El Gobierno de Pedro Sánchez se ha desvinculado este martes del nuevo viaje a Venezuela del expresidente José Luis Rodríguez Zapatero que, según la prensa local, llegó a Caracas el lunes por la tarde (madrugada del martes en España).
Tanto fuentes del Palacio de la Moncloa como del Ministerio de Asuntos Exteriores han señalado que se trata de un viaje "de índole particular". Es más, una fuente de Moncloa ha afirmado no tener constancia de que el expresidente tuviera intención de viajar a Venezuela y ha dicho desconocer su agenda. Zapatero, ha resumido, es un ciudadano privado que tiene libertad de movimiento.
El expresidente socialista es un firme partidario del diálogo en Venezuela y, por ello, es acusado por la oposición de favorecer al régimen de Nicolás Maduro. Él, por su parte, culpa a una parte de la oposición venezolana de haber rechazado, a última hora, las condiciones que había negociado con ellos en República Dominicana para la celebración de elecciones en mayo de 2018.
Finalmente, a esas elecciones no se presentó la oposición y la UE no las reconoció como válidas. Ese es uno de los motivos por los cuales los europeos no reconocen el mandato de Nicolás Maduro desde el pasado 10 de enero y han reconocido a Juan Guaidó como presidente encargado de convocar nuevas elecciones presidenciales libres, democráticas y supervisadas por la comunidad internacional.
SILENCIO DE ZAPATERO DESDE EL 23 DE ENERO
Desde que Guaidó se proclamó presidente encargado del país el pasado 23 de enero, Zapatero ha guardado silencio. No obstante, hace tiempo que el Ejecutivo -el de Pedro Sánchez y antes el de Mariano Rajoy-- se han desvinculado de los esfuerzos de Zapatero en Venezuela.
Este martes, fuentes del Ejecutivo han insistido en que la posición española es trabajar para que Guaidó convoque esas elecciones y han confiado en que el Grupo de Contacto Internacional promovido por la UE -a instancias de España-- le ayude en ese objetivo. Las mismas fuentes han reconocido que la situación es muy fluida y cambia con rapidez.
Lo importante, han dicho, es dejar trabajar a Guaidó y, a la vez, evitar cualquier conato de violencia, venga de donde venga. Además, por supuesto, de tratar de evitar que el próximo paso pueda ser una intervención militar.
Este lunes, la Alta Representante de Política Exterior y de Seguridad Común de la UE, Federica Mogherini, reconocía "frustración" por la situación y la "ausencia de movimiento" en Venezuela pero subrayó que el Grupo de Contacto es la única iniciativa "que da algo de esperanza de que las cosas puedan evolucionar a mejor" porque "es la única iniciativa política existente que tiene acceso a todos los actores diferentes en Venezuela".
"La frustración está relacionada con la situación sobre el terreno. Con esta ausencia de movimiento. El grupo de contacto internacional es lo único que da algo de esperanza de que las cosas puedan evolucionar a mejor", ha subrayado Mogherini en rueda de prensa al término de la reunión de los jefes de la diplomacia europea de los Veintiocho.