La leche es el alimento indispensable para un bebé y pueden pasar muchos meses alimentándose solo de ella, especialmente si es materna. Pero, a partir de los 6 meses y como parte de una dieta diversificada, se pueden introducir las leches de continuación y es posible que tengas dudas sobre cómo preparar y administrar correctamente un biberón. Por ello, en este artículo te resolveremos una de las dudas más comunes entre los padres que usan leche de continuación: ¿cuánto dura un biberón una vez preparado?
La importancia de las instrucciones
Por fortuna, no hace falta que sepas preparar tú mismo la leche de continuación, y es que en el paquete que se compra ya vienen las instrucciones. Es muy importante seguirlas detalladamente para evitarnos complicaciones, como una gastroenteritis. Es bien sabido que el sistema inmunitario del bebé no está tan desarrollado como el de un niño o un adulto, así que son más sensibles a las infecciones.
Al ser el bebé más delicado, tenemos que tener más cuidado con lo que se le da de comer, esto es, limitar la presencia de bacterias en la medida de lo posible. Un biberón que se haya preparado en condiciones de suciedad, o que haya estado demasiado tiempo preparado o fuera de la nevera puede dar lugar a la formación de bacterias, que podrían ser perjudiciales para el bebé.
Así, ser cuidadoso siguiendo instrucciones de preparación del paquete y consumirlos solo en los tiempos que especificamos, reduce al mínimo cualquier tipo de riesgo.
Duración de un biberón una vez preparado fuera de la nevera
Todos los expertos y marcas coinciden en que el mejor momento para darle al bebé un biberón es nada más prepararlo. Sin embargo, a veces esto no es posible porque el bebé no lo quiere, por ejemplo, y entonces viene bien guardarlo para más adelante. Pero ¿cuánto tiempo podemos tenerlo fuera de la nevera sin asumir riesgos?
Esto en general depende de la marca de la leche de fórmula que estemos utilizando, y lo más recomendable es leer bien las instrucciones del paquete. Dependiendo de la marca de la leche de continuación el tiempo de conservación fuera de la nevera podrá variar. Por ejemplo, en el caso de las leches de continuación de la marca Enfamil la recomendación es consumir preferiblemente después de la preparación y no dársela al bebé si ha estado fuera de la nevera durante 2 horas o más. Si el pequeño ha comenzado el biberón, pero lo ha dejado a medias, la fórmula debe consumirse en 1 hora y no debe refrigerarse. En cualquier caso, lo mejor es que consultes toda la información que te proporciona el propio envase de Enfamil.
Duración de un biberón una vez preparado en la nevera
Siempre es más recomendable guardar un alimento que no vamos a consumir inmediatamente en la nevera, para evitar la formación de bacterias. Y los biberones no son una excepción: también se pueden refrigerar. Es importante mencionar que el frío ralentiza en gran medida la aparición de bacterias, pero no la evita, y por eso, la comida, o los biberones en este caso, se pueden guardar durante más tiempo, pero no indefinidamente. Así que ¿cuánto es este tiempo en el caso de los biberones?
De nuevo, esto va a depender de cada marca y lo mejor es que consultes las instrucciones del paquete, donde tiene que venir especificado (en la etiqueta de la fórmula). Sin embargo, en general, una vez preparado y siempre que no se lo hayamos dado al bebé antes, la duración de un biberón en la nevera es de 24 horas. Eso sí, el biberón debe de guardarse almacenado a temperaturas entre 2 y 4 ºC y bien tapado, no hay que dejarlo en la nevera de cualquier forma.
Además, hay que tener en cuenta que nunca debe congelarse ni consumirse si ha estado fuera de la nevera durante más de 2 horas. Una refrigeración no puede "compensar" por el tiempo que el biberón ha estado fuera de la nevera, así que, si se ha pasado este tiempo, lo mejor que puedes hacer es desechar el biberón y preparar uno nuevo.
Y recuerda: la leche de continuación es perfectamente segura para tu bebé, y no hay de qué preocuparse siempre que se sea cuidadoso. ¡Buen provecho!
Aviso importante: la lactancia materna proporciona la mejor nutrición a los bebés. El pediatra es el que mejor te puede asesorar sobre el cuidado y la alimentación de tu hijo, y sobre los alimentos que debes añadir a la dieta conforme va creciendo.
