La sección sindical de CSIF en el Ayuntamiento de San Roque ha querido denunciar públicamente, mediante un comunicado de prensa, "la eliminación de varias unidades especializadas de la Policía Local, tras la reestructuración de la Delegación de Seguridad Ciudadana, aprobada y presentada ayer por el Gobierno municipal".
Concretamente, CSIF lamenta que la nueva estructura "haga desparecer unidades tan importantes como las de Medio Ambiente, Comercio o Educación Vial, cuyos agentes ofrecían al ciudadano un servicio cercano, de calidad, y con gran conocimiento en la materia". Y subrayan que "la Educación Vial fue la actividad mejor valorada por la comunidad educativa en 2018 y la unidad de Medio Ambiente cuenta con un gran respaldo de asociaciones y protectoras de animales".
Para esta sección sindical, "no se entiende la manera de proceder del concejal de Seguridad Ciudadana,Juan Manuel Ordoñez, cuya reestructuración del área supone un retroceso en vez de una apuesta decidida por avanzar y mejorar el servicio, que es lo que merecen tanto los ciudadanos como los propios agentes de la Policía Local". Por ello, CSIF espera que "el concejal, conocido por sus gestiones en la Policía que dejaron mucho que desear, recapacite y devuelva estas unidades especializadas al organigrama de la Policía Local".
Las excusas esgrimidas por el Gobierno local, considerando que “hay una merma de plantilla y hay que reforzar otros departamentos”, no tienen sentido teniendo en cuenta que cuando los sindicatos municipales reclaman un aumento del número de agentes, el alcalde siempre responde que San Roque está cumpliendo la ratio que marca la legislación vigente. Sea como sea, ya son diez años sin que se hayan ofertado nuevas plazas para acceder al cuerpo de la Policía Local de un municipio con un extenso término municipal y numerosos eventos extraordinarios que cubrir.
Por otra parte, la sección sindical de CSIF quiere felicitar al nuevo jefe de la Policía Local, recién nombrado a comienzos de mes, y al mismo tiempo pregunta al alcalde “cómo es posible que en tres años ya se hayan nombrado a tres jefes distintos”. Así, CSIF entiende que lo lógico sería que el nombramiento fuera duradero, para evitar la descoordinación que provocan en la plantilla los constantes cambios en la jefatura.