La plantilla de la empresa Cobre las Cruces, perteneciente a la multinacional canadiense First Quantum y que explota la mina a cielo abierto de Guillena, Salteras y Gerena; ha aprobado el principio de acuerdo alcanzado entre sus representantes sindicales y la dirección de la entidad, respecto al expediente de regulación de empleo (ERE) promovido ante el agotamiento a finales de este año de la veta de cobre explotada hasta ahora por la compañía en su corta minera.
El secretario adjunto a la Secretaría General de UGT FICA Andalucía, Rafael Dorante, ha informado a Europa Press que tal ha sido el resultado de la votación celebrada a lo largo de este pasado miércoles por la plantilla, para validar o no dicho principio de acuerdo.
Según ha precisado, estaban convocados a votar 235 trabajadores de Cobre las Cruces al ser incluidos en la votación los once empleados eventuales, y han ejercido su derecho al voto 207, lo que arroja una participación del 88 por ciento. Un total de 161 trabajadores de los que han votado ha apoyado el principio de acuerdo para el ERE, mientras 45 han votado en contra y media un voto en blanco, lo que arroja según ha detallado un apoyo del "77,77 por ciento" al preacuerdo.
Dado el caso, según ha agregado Rafael Dorante, los representantes sindicales de la plantilla y la dirección de Cobre las Cruces se reunirán el día 10 de este mes para firmar el ERE y que el mismo sea elevado a las autoridades judiciales.
El ERE, recordémoslo, responde a la situación ya prevista a cuenta del agotamiento de la veta de cobre explotada por la empresa a lo largo de estos años.
No obstante, recordemos que la empresa promueve un proyecto para recuperar cobre de la escombrera norte de su recinto minero, lo que permitirá continuar las actividades durante un año y medio o dos años más; si bien esta actividad implica menos carga de trabajo al no ser necesarios tratamientos de mineral como el correspondiente a la trituración ni otras operaciones asociadas.
Además, Cobre las Cruces tiene solicitados permisos a la Junta de Andalucía y la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir (CHG), para un nuevo proyecto de explotación subterránea destinado a la extracción de cinc, cobre, plata y plomo, si bien esta iniciativa está planeada con visos a su inicio más adelante.
EL OBJETIVO DEL ERE
Mientras el complejo minero cuenta con una plantilla directa de 235 personas y sus empresas subcontratadas contarían con unos 500 empleados, el ERE negociado con la plantilla está destinado a ajustar la misma a la carga laboral del proyecto alternativo de recuperación de cobre en la escombrera norte, que como ha sido señalado no necesita tantas operaciones ni plantilla como la extracción de mineral en la corta.
La negociación del ERE, según UGT y CCOO, partía de una propuesta inicial de cien despidos con indemnizaciones de 20 días por año de servicio hasta un tope de 12 mensualidades. El principio de acuerdo, según los sindicatos, reduce a 68 el número de despidos con indemnizaciones de 30 días por año de servicio y un tope de 20 mensualidades, garantizando además las condiciones de los empleados no afectados por el despido colectivo, que continuarán trabajando en las actuaciones de la escombrera norte.
En ese sentido, Rafael Dorante ha defendido que los acuerdos alcanzados dan "continuidad" al proyecto minero, con la extracción de cobre en la escombrera norte en espera del proyecto de explotación subterránea, que según ha dicho prolongaría la vida operativa de la mina aproximadamente "hasta 2038".
