El Granada logró su segunda victoria consecutiva al vencer este jueves por 4-1 a un Eibar muy errático en ambas áreas, que sigue como colista de la clasificación y que se sitúa ya a cinco puntos de la permanencia, mientras que el triunfo permite a los andaluces, muy serios y eficaces durante todo el choque, seguir octavos y no perder la senda de los puestos europeos.
Los tantos de Roberto Soldado y de Antonio Puertas permitieron al Granada marcharse con una clara ventaja al descanso tras un primer tiempo igualado pese al marcador, mientras que en el segundo, que fue un querer y no poder del Eibar, Kike García redujo diferencias antes de que los locales sentenciasen el duelo con otro tanto de Soldado y el último del brasileño Robert Kenedy.
El primer tramo de encuentro fue bastante equilibrado, con los dos equipos respetándose más de lo esperado y más pendientes de no cometer ningún error que de fabricar buenas acciones ofensivas.
José Luis García 'Recio' firmó mediado el acto inicial el primer remate a portería, ante el que mostró bastante seguridad el meta portugués Rui Silva, en la acción justo anterior al 1-0.
Un potente y colocado remate desde fuera del área de Roberto Soldado, tras un buen pase interior de Antonio Puertas, sirvió para adelantar a los locales, aunque el VAR tuvo que validar la acción al romper Anaitz Arbilla el fuera de juego señalado en primera instancia por el trío arbitral.
El Eibar respondió con una clara doble ocasión de Bryan Gil y del portugués Rafa Soares, solventada por un Rui Silva que, poco después, volvió a aparecer con acierto ante otro remate del activo Bryan Gil.
El Granada volvió a tirar de eficacia para marcar el 2-0, en el minuto 37 y tras un saque de esquina, en su segunda llegada peligrosa del partido, esta vez con un chut desde fuera del área de Antonio Puertas que llegó a tocar levemente Miguel Ángel Atienza para despistar al serbio Marko Dmitrovic.
El Eibar salió a por todas en el segundo tiempo, con el senegalés Pape Diop rematando de cabeza alto, Recio poniendo en apuros a Rui Silva en un saque de esquina y Sergio Álvarez enganchando una volea en buena posición para marcar pero que no encontró portería.
La ocasión más clara de los visitantes llegó a la hora de juego con un mano a mano de Pedro León ante Rui Silva que el atacante armero concluyó con un remate fuera.
La insistencia del Eibar provocó que llegara el 2-1, marcado por Kike García tras realizar una buena acción individual ante Jesús Vallejo en el área rojiblanca.
El Granada, demasiado contemplativo en la segunda parte, rozó su tercer gol con un cabezazo del francés Maxime Gonalons que estuvo a punto de remachar Soldado en la línea de gol.
Los rojiblancos, sin embargo, aprovecharon la apuesta ofensiva del Eibar y la primera vez que pudieron montar una contra peligrosa marcaron el 3-1 en una acción bien llevada por Kenedy y cerrada con un remate a placer por Soldado.
Los visitantes se vinieron abajo con ese tanto y, a renglón seguido, una pésima cesión con la cabeza de José Ángel Valdés 'Cote' a Dmitrovic fue aprovechada por Kenedy para anotar el 4-1.
- Ficha técnica -
4. Granada: Rui Silva; Foulquier, Germán, Vallejo (Nehuén, m.80), Quini; Yangel Herrera, Montoro (Víctor Díaz, m.71), Antonio Puertas, Machís (Kenedy, m.71); Jorge Molina (Gonalons, m.50) y Soldado (Carlos Neva, m.80).
1. Eibar: Dmitrovic; Arbilla, Oliveira, Sergio Álvarez (Cote, m.60), Rafa Soares (Pedro León, m.46); Pape Diop (Quique, m.60), Recio, Atienza; Pozo, Bryan Gil (Kevin Rodrigues, m.83) y Kike García (Unai, m.83).
Goles: 1-0, (m.21) Soldado. 2-0, (m.37) Antonio Puertas. 2-1, (m.64) Kike García. 3-1, (m.77) Soldado. 4-1, (m.81) Kenedy.
Árbitro: Jaime Latre (C. Aragonés). Mostró cartulina amarilla al local Jorge Molina (m.41) y al visitante Recio (m.42)
Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 31 de LaLiga Santander disputado en el Estadio Nuevo Los Cármenes a puerta cerrada. Antes del inicio del choque se guardó un minuto de silencio por los recientes fallecimientos de los ex jugadores del Granada Cipriano González 'Ñito' y Cristóbal Lope Acosta.