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El Atlético Sanluqueño no se achicó ante el Nàstic de Tarragona

El equipo de Sanlúcar y el tarraconense empataron a cero goles en El Palmar

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  • Alfonso Fernández busca el lanzamiento a portería ante la presencia de su compañero Cervero -
  • Un punto para cada conjunto en un histórico encuentro
  • Los verdiblancos llegaron a poner contra las cuerdas a un rival con aspiraciones de estar arriba
  • La aficióna verdiblanca reconoció el trabajo y esfuerzo del equipo de Pedro Buenaventura

—Atlético Sanluqueño—Falcón, Javi Duro, Pelón, Armental (Miguelete 80’), Cervero  (Canillas 74’), Edu Oriol (Navas 74’), Theo, Julen Azkue, Toni, Héctor (Riego 60’) y Alfonso Fernández (Marc Caballé 60’). Entrenador: Pedro Buenaventura.

—Nàstic de Tarragona—Manu García, Pol Domingo, Ribelles, Fran Carbiá (Edgar 55’), Francesc (Bonilla 71’), Quintanilla, Aythami (Pedro Martín 55’), Robert Simón (Pol Prats 82’) y Joan Oriol. Entrenador: Raúl Agné.

Árbitro: Pérez Peraza, del Colegio de Tenerife. Auxiliado en las bandas por Muñoz Guillén (Colegio de Tenerife) y Grande Rabadán (Colegio de Castilla La Mancha). Cuarto árbitro: Sánchez Carrera, del Colegio de Andalucía. Vieron la cartulina amarilla los jugadores Pol Domingo (12’), Héctor (25’), Francesc (26’), Riego (68’), Ribelles (87’), Canillas (90’) y Aythami (92’).

Incidencias: Encuentro correspondiente  a la jornada 1 del Grupo 2 de la Primera RFEF. Partido disputado en El Estadio El Palmar ante unos 1.800 aficionados en una tarde-noche con una temperatura agradable. Terreno de juego algo blando en algunas zonas. El Atlético Sanluqueño le entregó al Nàstic de Tarragona un banderín de recuerdo por ser la primera vez que visita el Estadio El Palmar. Los hermanos Oriol, Edu en el equipo local, y Joan, en el visitante, ejercieron de capitanes. Los aficionados del Atlético Sanluqueño despidieron a sus jugadores con una gran ovación.

El Atlético Sanluqueño empató a cero goles ante el Nàstic de Tarragona en el Estadio El Palmar en un partido histórico. Nunca se habían enfrentado antes en un encuentro oficial y además para ser por primera vez lo hicieron en la recién estrenada Primera RFEF.

Lo cierto es que el conjunto tarraconense inició bien el partido porque consiguió encerrar al de la Ciudad de la Manzanilla. Estaba bien posicionado en el terreno de juego y los verdiblancos no se sentían cómodos. Pero el equipo que dirige Pedro Buenaventura se quitó esa presion inicial y empezó a carburar. El típico dicho de que fue e menos a más.

La polémica llegó en el minuto 24 cuando se pidió penalti por un posible derribo sonre Armental aunque el árbitro no lo entendió como tal. El primer aviso del equipo catalán llegó en el minuto 30. Francesc remata de cabeza pero ese intento de sorprender a Falcón no tuvo consecuencias. La incertidumbre llegó en el minuto 33. Balón que llega al área de la portería que defendía el Atlético Sanluqueño pero ningún visitante logra rematar ni ningún local despejar. Se marchó por la línea de fondo. El 1-0 pudo haber llegado en el minuto 40. Alfonso Fernández cuelga el balón dentro del área, remata de cabeza Cervero y el esférico se marcha por la línea de fondo por muy poco. El susto se lo llevó la afición local en el minuto 43. Robert Simón realiza un centro muy cerrado y el balón termina estrellándose en el balón cuando posiblemente su intención no era buscar el gol y sí una acción de peligro.

Al descanso se llegó con el resultado de empate a cero goles y con las espadas en todo lo alto. Los porteros Falcón y  Manu García tuvieron poco trabajo porque el peligro vino sobre todo por acercamientos más que por ocasiones claras de gol.

Ya en el inicio de la segunda parte, el Nàstic de Tarragona quiso sorprender en los primero minutos. Fran Carbiá remató a puerta en el 4 pero Falcón estuvo atento a cualquier e inesperado susto. En el 14, Pedro Martín con un gran cabezazo casi logra el 0-1. El Atlético Sanluqueño apretó con el paso de los minutos porque vio la opción de lograr la victoria ante un rival que le quintuplica en presupuesto. Fue una fase del partido donde la afición verdiblanca se encendió en el buen sentido de la expresión. Era consciente que su equipo lo daba todo en el terreno de juego pero hacía falta ese empujón desde el graderío, que recordó estas tardes y esas noches de entusiasmo y emociones.

En el 23, Armental centró el balón al área pero no encontró rematador. En el 33, Toni saca una falta con ‘veneno’ en el lanzamiento y tampoco encontró repuesta en alguno de sus compañeros. Lo intentó el Atlético Sanluqueño en los últimos minutos, también el Nàstic de Tarragona, pero el 0-0 se mantuvo hasta el final. Un punto para cada equipo. Lo mejor, las ganas del Atlético Sanluqueño.

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