La Guardia Civil, en el marco de la operación 'Green Tower', ha localizado en el paraje Las Matías de Barranquete-Níjar (Almería) unas 24.000 plantas de marihuana "de gran tamaño" en el interior de un invernadero, de las que se ha incautado y que arrojan un peso aproximado de 31.000 kilos de hoja sin secar.
Asimismo, en el marco de esta actuación se ha detenido a cinco personas como presuntas autoras de un delito de cultivo y elaboración de plantación de marihuana ('Cannabis sativa'), según ha informado este sábado la Benemérita en una nota.
La investigación se inició cuando se tuvo conocimiento de una posible plantación de marihuana en el interior de una finca invernada ubicada en Níjar.
Tras el análisis de la información obtenida, los agentes centraron la investigación en una finca invernada del paraje Las Matías de Barranquete-Níjar, de unos 42.000 metros cuadrados, dividida en dos invernaderos.
En dicha finca se realizó un "discreto" dispositivo de vigilancia, comprobando que se encontraba plantada de tomates, si bien había "poca actividad laboral" en relación al cultivo y mantenimiento de las matas de tomate.
Por el contrario, los agentes observaron cómo, por la noche, en uno de los invernaderos de la finca, existía un "gran foco" de luz, lo que llamó la atención, ya que no es habitual que se realicen labores a esas horas.
A estas dudas se sumó el "fuerte olor" característico de las plantas de marihuana, por lo que la Guardia Civil llevó a cabo una inspección dentro de la finca.
Como resultado de la misma, cinco personas, al comprobar la llegada de los agentes, emprendieron la huida hacia el interior de la finca invernada, intentando ocultarse entre las matas de tomate, llegando al segundo invernadero, en el que se encontraban las plantas de marihuana.
Para poder localizar a estas personas, ocultas entre la cantidad de plantas de marihuana aprovechando su gran tamaño, los agentes tuvieron que hacer un cordón humano para no dejar ningún punto sin registrar, según explica la Benemérita.
Una vez detenidas, los agentes comprobaron cómo la mitad de los 42.000 metros cuadrados, concretamente la parte más alejada de la puerta de entrada, estaba dedicada en exclusiva al cultivo de plantas de marihuana, así como la otra mitad estaba dedicada al cultivo de tomate, si bien no tenía prácticamente mantenimiento, pero servía de "tapadera" para evitar la actuación de la Guardia Civil.
La operación ha sido desarrollada por agentes de la Comandancia de la Guardia Civil de Almería.