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Andalucía

Del Río (TSJA): Ningún Gobierno ha logrado un nivel óptimo para la Justicia

Lorenzo del Río cree que ningún Gobierno andaluz ha alcanzado el nivel de "satisfacción" esperado. En muchas cuestiones está aún "a medio camino"

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  • Lorenzo del Río -

El presidente del Tribunal Superior de Justicia de Andalucía (TSJA), Lorenzo del Río, cree que ningún Gobierno andaluz ha logrado alcanzar el nivel de "optimización y satisfacción" esperado para la administración de Justicia, que en muchas cuestiones está aún "a medio camino".

En una entrevista con EFE, el presidente del alto tribunal andaluz valora que todas las Consejerías andaluzas de Justicia hayan intentado "no quedarse atrás" y avanzar en el plan estratégico de calidad.



"Pero lo cierto es que con ninguna de ellas se ha conseguido el nivel de optimización y satisfacción que todos esperábamos", ha subrayado.

Del Río admite que la decisión del actual Gobierno andaluz de incluir a la Justicia en una Consejería con otras áreas compartidas como la de Turismo le "alarmó", dado el volumen de la estructura judicial en esta comunidad.

"Es verdad que en el día a día se intenta hacer un esfuerzo por la parte política para que Turismo funcione y la Justicia también, pero me gustaría que hubiera un mayor impulso en infraestructuras", reclama.

Las infraestructuras son precisamente uno de los retos a los que, en su opinión, se enfrenta actualmente la Justicia, que requiere de la unificación de sedes y, especialmente, de un nuevo sistema organizativo frente al actual, "trasnochado e ineficaz" en cuanto a la gestión de los recursos.

"No somos ágiles para la resolución de problemas coyunturales o estructurales que se plantean por ejemplo con los refuerzos de personal", según Del Río, para quien lo que en otras administraciones se resuelve con agilidad, en la de Justicia se convierte en "todo una losa".

Algo que ayudaría a solventar estos problemas en la Ley de Eficiencia Organizativa, que confía en que pueda salir adelante este año: "Lo contrario sería muy frustrante para los jueces".

EL PAPEL CERO, "UN ESLOGAN"

El otro gran reto es a su juicio el cambio tecnológico: "Lo del papel cero en la administración de Justicia no deja de ser un eslogan", mantiene el presidente del TSJA, que pone como ejemplo de las carencias tecnológicas de la administración judicial que, en Andalucía, ninguna de las comunicaciones con el Ministerio Fiscal puede hacerse de forma telemática.

Coincidiendo con el 41 aniversario del Estatuto de Autonomía, los mismos años que lleva como juez, Del Río cree que en estas últimas cuatro décadas la Justicia en Andalucía ha avanzado en paralelo a la sociedad andaluza y han sido muchos los avances: "Cuando inicié mi primer destino trabajaba con una máquina de escribir y papeles en negrilla para las copias".

"Se ha modernizado mucho la Justicia, pero también han aumentado significativamente el volumen de asuntos y su complejidad", advierte el presidente del alto tribunal andaluz sobre una cuestión que enlaza con otro de los problemas de la Justicia: la falta de una "estructura equilibrada" en la carrera judicial, es decir, la existencia de destinos "livianos" frente a otros órganos "sobrecargados de trabajo".

EVITAR 'FUGAS' EN LA SEGUNDA INSTANCIA

Frente a lo que ocurre en otros países europeos, en España "la segunda instancia penal, los órganos colegiados, no están potenciados ni gratificados como debiera", de ahí que haya a quien le "compense" quedarse en juzgados de instrucción en lugar de optar a una Audiencia Provincial.

También hay quienes deciden recorrer el camino a la inversa, como ha ocurrido en la Audiencia de Sevilla -especialmente sobrecargada por la causa de los ERE-, donde tres magistrados han pasado a juzgados unipersonales.

Para frenar esa situación, Del Río aboga por un cambio legislativo que permita establecer complementos específicos que hagan más "atractivos" esos destinos: "Es de Perogrullo. En cualquier otro país se potencia la colegiación", opina.

Respecto a la pandemia, aunque tras el parón inicial ha mejorado el nivel de resolución, el de ingresos sigue siendo "muy elevado", algo que, según Del Río, habrá que abordar desde el punto de vista político y legislativo: "Un país no puede tener el nivel de litigiosidad que existe ahora mismo. Con los medios que tenemos nunca vamos a poder resolverlo en el tiempo", señala.

LA SOBREEXPOSICIÓN DE LA JUSTICIA Y EL DETERIORO DE SU IMAGEN

Del Río advierte también de la excesiva "sobreexposición" de la Justicia en España, donde durante la pandemia "se la ha obligado a tomar constantemente decisiones" relacionadas con confinamientos o cierres perimetrales, "cuando en los países europeos eso se ha solventado con decisiones políticas o parlamentarias".

Reconoce que a ese "deterioro de la imagen" en el que al final se traduce esa "sobreexposición", tampoco contribuye la "lucha política y partidista" que se ha puesto de manifiesto en la falta de acuerdo para la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ): "Qué hay más frustrante que un órgano que ha nacido para evidenciar la independencia (de la Justicia) parezca todo lo contrario".

RENOVACIÓN EN EL CARGO

Es precisamente esa falta de acuerdo para la renovación del CGPJ lo que lo mantiene en el cargo en funciones desde hace ahora un año, dado que el órgano de gobierno de los jueces no puede llevar a cabo nombramientos de altos puestos judiciales hasta que no se renueve.

Tras dos mandatos consecutivos como presidente del TSJA, Del Río decidió optar a un tercero y último de otros cuatro años, una decisión que condiciona ahora a lo que pueda alargarse en el tiempo esta situación de 'interinidad'.

"Si esto sigue así y el consejo tarda otros dos o tres años en renovarse, seguramente habrá que repensar un poco esa idea inicial, porque ya casi habría consumido un tercer mandato sin haberlo hecho en la forma lógica y correcta", dice.

Y si algo desea desde su posición es que se hable "en serio" de la Justicia, que se haga "un esfuerzo político y parlamentario para decir: Vamos a coger el toro por los cuernos". 

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