La primera dama de Estados Unidos, Michelle Obama, y su hija Sasha han comenzado sus vacaciones en la Costa del Sol, donde pretenden relajarse y descansar, ajenas al revuelo mediático que ha causado su presencia en este destino, que vive su temporada turística alta.
El avión que las ha trasladado llegó a las 10:30 horas al aeropuerto de Málaga, donde no estaba prevista ninguna recepción oficial de las autoridades locales, al tratarse de una visita privada.
Desde el aeródromo, una caravana formada por una quincena de vehículos se trasladó hasta el hotel Villa Padierna en Benahavís, municipio próximo a Marbella, donde llegó a las 11:45 horas en medio de un fuerte dispositivo de seguridad.
Los vehículos entraron directamente en el aparcamiento subterráneo del complejo hotelero, en el que Michelle Obama y su hija fueron recibidas por el propietario del establecimiento, Ricardo Arranz, y su mujer, Alicia Padierna de Villapadierna.
La esposa del presidente norteamericano se mostró “encantadora”, como una turista “normal”, y ha comentado que tenía “muchas ganas de conocer el hotel y sus jardines”, explicó a Efe Arranz, quien añadió que la primera dama estadounidense ha venido “a descansar” y no quiere ningún tratamiento especial. De hecho, ya recorrió como una turista cualquiera el centro histórico de Marbella.
Michelle Obama y su hija Sasha, de 9 años, se alojan en una de las once villas del hotel, decorada al estilo inglés en tonos rojo y verde, y que cuesta 5.000 euros por noche.
La familia Obama y sus amigos han reservado unas sesenta habitaciones de este hotel -incluidas las destinadas al servicio de seguridad-, un complejo de cinco estrellas de gran lujo, considerado entre los treinta mejores del mundo por el portal Expedia.
A este viaje, de carácter privado, no está previsto que se sume el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, quien pasó ayer su 49 cumpleaños en Chicago sin su familia, ya que su hija mayor, Malia, se encuentra en un campamento de verano.
La visita de Michelle Obama ha suscitado un gran interés de los medios de comunicación, cuya labor se ha visto dificultada por el fuerte dispositivo de seguridad, tanto en el aeropuerto como en la entrada a la urbanización en la que está ubicado el hotel.
De la agenda de la primera dama ha transcendido hasta el momento que hoy visitará Granada para acudir a lugares como la Alhambra, la Catedral o las zonas del Albaicín y el Sacromonte, además de la visita el próximo domingo a los Reyes, que veranean en Palma de Mallorca.