Moratinos también consiguió el Acuerdo sobre las Pensiones, pero Caruana fue creyéndose su estatus de Ministro Principal y empezó a trabajar en el tripartito de igual a igual que España y Gran Bretaña. Con el tiempo ha seguido creciéndose y se ha convertido en el Portavoz del mismo. Hace y deshace, provoca con sus declaraciones pero lo que es más importante, provoca, ostiga e, incluso, a llegado a retener a las patrulleras de la Guardia Civil en nuestras propias aguas territoriales que él ya ha hecho suyas. Todo ello lo ha llevado a cabo con una permisividad de España que le ha consentido todo este tipo de bravuconerías, dejando siempre en evidencia a nuestra Fuerza de seguridad.
Siempre bajo el pretexto de mantener el Status Quo, ha llegado a defender a traficantes frente a la Guardia Civil. En el colmo de la chulería y rompiendo todos los protocolos policiales internacionales, su policía ha llegado a entrar en una vivienda de San Roque sin autorización de ningún tipo y ha requisado objetos que se han llevado a Gibraltar. Ha acusado a la Guardia Civil de hacer, precisamente, lo que el viene haciendo. Y su actitud chulesca viene causando un gran malestar en toda nuestra comarca, quizás, porque se encuentra cerca de sus elecciones y necesita hacer ver su nacionalismo más intenso porque las encuestas no le van todo lo bien que él querría. En este ambiente, España pretende abrir un Instituto Cervantes en Gibraltar.
Teniendo en cuenta según sus propios estatutos que los Institutos Cervantes se abren en países extranjeros para, fundamentalmente, enseñar la lengua española, me parece absolutamente ridículo este tema porque sería UN RECONOCIMIENTO A LA SOBERANÍA DE GIBRALTAR Y A QUE ES UN PAÍS EXTRANJERO, además de la ridiculez de la enseñanza del español a los yanitos.
La apertura del Cervantes en Gibraltar haría que Caruana lo utilizara como un auténtico triunfo de su teoría soberanista y por parte de España un reconocimiento expreso de que Gibraltar es soberano. Sería un tremendo error diplomático que, nuevamente, nos haría caer en el ridículo. El Foro Tripartido debería servir, en primer lugar, para que Gibraltar no provoque ni retenga a nuestra Guardia Civil. Y a partir de ahí, se podría empezar a hablar de otras colaboraciones pero nunca con el Instituto Cervantes.
