La líder de la extrema derecha francesa, Marine Le Pen, dijo este lunes sentirse muy serena al comienzo del proceso en el que se le juzga, junto a una treintena de miembros de su partido, por malversación de fondos del Parlamento cuando era eurodiputada, e insistió en que confía en la Justicia y en que es inocente.
"Tenemos un montón de argumentos para defender lo que creo que es la libertad parlamentaria, que es lo que se discute en este asunto", señaló Le Pen en declaraciones a la prensa a la entrada del Tribunal Correccional de París, en un juicio que si se resuelve con condena podría suponer su inhabilitación.
Recordó que ella y el resto de los acusados van a tener tiempo, durante los dos meses del juicio, de "demostrar que no se violó ninguna regla, es decir, ninguna regla política y ninguna regla del reglamento del Parlamento" Europeo.