El profesional que sufrió la agresión ya ha presentado la denuncia contra los agresores
La Empresa Pública de Emergencias Sanitarias (EPES), así como la Delegación Provincial de Salud, desean mostrar su respaldo a la concentración que tuvo lugar ayer en el Hospital Universitario Puerta del Mar para rechazar y condenar la agresión física y verbal sufrida recientemente por un equipo del 061 cuando atendía un aviso en la capital gaditana.
La dirección provincial del 061 activó el mismo día del suceso su protocolo contra las agresiones que incluye asistencia sanitaria y jurídica. Así, el profesional que sufrió este desagradable episodio de violencia a manos de los familiares de la paciente a la que atendía, fue atendido de las lesiones y ya ha presentado la correspondiente denuncia contra los agresores auspiciada por la asesoría jurídica de la EPES. Asimismo, la víctima ha recibido asistencia psicológica.
En este sentido, conviene recordar que la agresión física o intimidación grave contra profesionales sanitarios en el ejercicio de su función pública asistencial viene siendo considerada como delito de atentado por los tribunales de justicia, y así se han dictado sentencias en casos muy similares, castigándose con penas de uno a tres años de prisión.
Tanto la EPES como la Delegación se solidarizan y apoyan tanto al profesional agredido como al equipo que se vio envuelto en esta intolerable situación, al tiempo que condenan cualquier tipo de violencia, tanto física como verbal, dentro o fuera de un centro sanitario, recordando que bajo ningún concepto o circunstancia puede justificarse este tipo de actuaciones.
Además, desean destacar la profesionalidad del equipo, que pese a sufrir estos lamentables hechos no dejaron de cumplir con su deber, terminando la asistencia de la paciente; en este sentido, el procedimiento ante agresiones del 061 contempla la activación de otro equipo para realizar la atención en caso de que el actuante sufra cualquier incidente.
La Empresa Pública de Emergencias Sanitarias, al igual que el Servicio Andaluz de Salud (SAS), cuenta con un protocolo de agresiones que, además de las mencionadas medidas asistenciales, jurídicas y psicológicas, pone a disposición de sus profesionales cursos de formación sobre el manejo de situaciones difíciles, que un tercio de la plantilla de la provincia ya ha realizado en lo que va de año.