El convenio colectivo expiró el 31 de diciembre de 2009, existiendo importantes diferencias entre ambas partes. La patronal pretende introducir en el texto una cláusula que permita poner en marcha el despido exprés, ahorrando trámites y costes a la hora de aligerar las plantillas.
La parte social, mientras tanto, defiende el mantenimiento de los derechos adquiridos en el convenio todavía en vigor, incorporándose además un incremento del 3 por ciento correspondiente al IPC de 2010 con el objetivo de que los trabajadores no pierdan poder adquisitivo.
En las últimas semanas ya se han llevado a cabo distintas acciones de protesta, con paros parciales que han interferido en la normal prestación del servicio. Sin embargo, en esta ocasión se programa un paro general de 24 horas en todo el territorio nacional.