El Santuario se ha llenado de niños a los que sus padres han querido poner al amparo de esta Virgen a la que profesan devoción dentro y fuera de España
Unos 8.000 niños se han presentado durante la mañana de este domingo ante la Virgen del Rocío en la celebración de la Candelaria o Fiesta de la Luz, un acto en el que han pasado bajo su manto.
Se trata de una de las fechas más especiales y emotivas del calendario rociero, en la que los niños se convierten en protagonistas buscando el amparo de la Virgen del Rocío.
Otro año más, después de más de 31, la Hermandad Matriz de Almonte ha vuelto a organizar una de las celebraciones marcadas en rojo en el calendario de los rocieros; se ha rememorado en El Rocío la presentación del Niño Jesús en Jerusalén, como marcaba la tradición de la época respecto a los primogénitos de cada familia.
Como cada primer domingo de febrero, el Santuario de la Blanca Paloma, situado de los pies de la marisma de Doñana, se ha llenado de niños a los que sus padres han querido poner al amparo de esta Virgen a la que profesan devoción dentro y fuera de España.
La 'presentación' ha comenzado tras concluir la misa de domingo y, a partir de ese momento, sin descanso, han comenzado a pasar los niños por el manto de la Blanca Paloma.
Han sido alrededor de 8.000 niños, según han informado a EFE desde a Matriz de Almonte, los que hoy han pasado junto a la Virgen del Rocío y han recibido la bendición en un santuario repleto de gente en el que no ha faltado la música de los tamborileros.
El paso ha sido este año más fluido ya que, para celebrar la Fiesta de la Luz enmarcada en el Jubileo 2025, la Virgen ha sido bajada de su camarín y entronizada en la peana de su paso.