Como en ‘Héroe por accidente’, la película de 1992 protagonizada por Andy García, en Lepe se busca a un héroe anónimo, un joven africano que redujo a un ladrón que intentó huir robando un coche, en el que había dos niños de 12 y 8 años, y del que no se sabe nada desde entonces.
El alcalde de Lepe, Juan Manuel González (PP), ha dicho a Efe que se intenta localizar al joven con el fin de agradecerle públicamente su gesto, al entender que la acción que ha protagonizado esta persona "merece un reconocimiento", de modo que ha iniciado las gestiones para intentar localizarle.
Se trata de un joven que el pasado jueves retuvo y redujo a un hombre que acababa de robar en una tienda de la zona de Los Cruces del municipio onubense, un punto muy concurrido que es zona de paso tanto a pie como de los vehículos que circulan a distintas localidades de la costa occidental onubense.
Según ha relatado, poco antes de las 14.00 horas, un individuo robó presuntamente en la tienda, huyó a pie y llegó a una zona semaforizada de acceso a la localidad, donde intentó robar un coche, aunque el conductor lo tenía cerrado desde dentro y no lo consiguió.
Su segundo intento fue en un coche en el que se encontraban en su parte posterior dos niños de 12 y 8 años, con el que se hizo forzando a la conductora a salir de él.
Mientras varias personas observaban atónitas la escena, un joven anónimo se dirigió al coche, interponiéndose en la marcha del mismo, y evitando en principio que pudiese reanudar la marcha.
Algunos testigos han dicho a Efe que la actitud del joven encarándose con el ladrón le provocó tal nerviosismo que no fue capaz de iniciar la marcha, y en ese momento se inició una pelea entre ambos, en la que le consiguió sacar del coche y reducirlo en el suelo.
"El chaval se encaró con él, comenzaron a pelear, y el ladrón no era capaz de conducir, como si tuviese echado el freno de mano", explicaron.
En ese momento, algunas de las personas que estaban presenciando la escena llamaron a la policía, y segundos después se personaban agentes de la Policía Local y la Guardia Civil, que se hicieron con el presunto ladrón.
La casualidad quiso que los agentes estuviesen muy cerca, en un colegio al que acudieron para regular la salida de los alumnos, de modo que no tardaron mucho en hacer acto de presencia en la zona.
Los testigos indican que todo ocurrió en cuestión de segundos, "y mientras algunas personas miraban, él se abalanzó sobre el coche, impidió que avanzase y redujo al ladrón, sin importarle si iba armado o podría sufrir daño".
Sin embargo, en medio de la confusión que provocó este hecho, el joven inmigrante decidió irse del lugar de los hechos, sin que nadie tenga noticias de él desde entonces, aunque Juan Manuel González sí ha señalado que se trabaja con algunas "pistas" sobre su posible identidad.
Y es que algunas de las personas que le vieron de cerca le habrían identificado como "alguien que lleva en el pueblo varios años, y que está casado o vive con una lepera", pero no hay más datos fiables que puedan conducir a su identificación.
Por ello, el alcalde, en nombre de la corporación local, espera que el misterio se vaya aclarando en los próximos días, al tener en cuenta que "hay gestos humanos que hay que destacar, y la actitud de esta persona bien merece un reconocimiento por parte de sus vecinos".