El día amaneció soleado y Guadix vivió su día festivo, con cientos de accitanos y accitanas que se echaron a las calles para ver a San Torcuato y a la reliquia del santo brazo. Sin embargo, se vio menos presencia de gente en las calles que en otros años, probablemente, porque muchos aprovecharan la festividad y casi el fin de semana para irse a la playa u otros destinos.
La celebración de San Torcuato, patrón de Guadix, seguía el miércoles con la celebración de las vísperas de la festividad en la Catedral a las ocho y media de la tarde. Media hora más tarde, a las nueve y también en la Catedral, el alcalde de Celanova, José Luis Ferro Iglesias, localidad hermanada con Guadix, ofreció el pregón de San Torcuato. Como colofón, la Banda Municipal de Música ofreció un concierto. También el miércoles tuvo lugar la tradicional verbena en la Plaza de la Constitución. Una cita en la que no faltó una degustación de tortas saladas y habas.
El jueves se inició el día con la procesión cívica de la corporación municipal bajo mazas, con salida a las once menos cuarto desde el Ayuntamiento hasta la Catedral, desde donde partió, una vez finalizada la misa en honor al patrón, la procesión con la imagen de San Torcuato y su reliquia por las calles del casco histórico accitano.
San Torcuato es un santo mártir venerado por las iglesias ortodoxa y católica. Es el patrón de Guadix (la antigua Acci). De conformidad con la tradición, fue obispo de la antigua diócesis de Accitana y el primero de los siete varones apostólicos enviados por Roma en el siglo I para evangelizar España.
Un año más, los accitanos cumplieron con la tradición de honrar a su Patrón San Torcuato. Y lo hicieron con la celebración de una Misa Pontifical en la catedral y una procesión por las calles de la ciudad, con la imagen y el brazo de San Torcuato.
Las celebraciones comenzaron en el Ayuntamiento de la ciudad, desde donde se inició una procesión cívica con las autoridades hasta el templo catedralicio. Una vez en la catedral, dio comienzo al celebración de la Eucaristía, presidida por el Obispo de Guadix, Mons. Ginés García, y concelebrada por el Cabildo y por los sacerdotes de la ciudad.
Después, de la Eucaristía tuvo lugar la procesión por las calles de la ciudad con la imagen de San Torcuato y la reliquia del brazo, que se conserva en la ciudad accitana.
San Torcuato es el Patrón de la ciudad de Guadix. Pero también es día de fiesta litúrgica en toda la diócesis, porque San Torcuato también es el Patrón de la diócesis de accitana. De hecho, según la tradición, San Torcuato fue el primer Obispo de estas tierras que escucharon el anuncio del Evangelio ya en el siglo I, pocos años después de la muerte de Jesús.
San Torcuato, que llegó al sureste peninsular acompañado por otros seis varones apostólicos, predicó en la antigua Acci y sembró los cimientos de una iglesia local que hoy conocemos como la diócesis de Guadix. Desde San Torcuato, en la sucesión apostólica, han pasado 87 obispos por esta diócesis. Mons. Ginés García, el actual prelado, hace el número 88 en la sucesión en la sede accitana, la primera en el tiempo de las diócesis en España.