Los Juzgados vuelven a acoger la citación por temas urbanísticos del pasado a concejales y alcaldes portuenses. La Justicia llama de nuevo a la puerta y El Puerto vuelve a sonar, y no precisamente por asuntos positivos.
La palabra imputación comienza a ser más veces utilizada de lo apetecido. Pensando, creyendo y deseando que todo finalmente quede en un simple sobreseimiento, la casualidad deja de ser mera coincidencia, cuando el Ayuntamiento o, en mayor medida, sus alcaldes empiezan a estar salpicados por la duda.
El Puerto entra en las estadísticas. Ésas de las que te otorgan el honor (el dudoso) de entrar a formar parte de la oficialidad. En el Estado español hay más de 1.900 personas imputadas en causas abiertas por corrupción y al menos 170 han sido condenadas por este tipo de delitos en la última legislatura.
No obstante, la mayoría de estos condenados no están en prisión, ya sea porque se les impuso una pena de cárcel que no les obligaba a ingresar, porque únicamente fueron inhabilitados o multados o porque aún tienen recursos pendientes.
La imputación se utiliza para atribuir la responsabilidad de un hecho reprobable a una persona; señalar la aplicación de una cantidad para que sea tomada en cuenta en un registro. La mujer del César no solo debe ser honrada.
