El presidente de la nueva Cámara de Comercio de España y de Freixenet, José Luis Bonet, ha reivindicado el papel del empresario en España como generador de riqueza y de empleo, aunque ha reconocido que existen algunos casos "poco ejemplarizantes y dignos de censura".
"Pero son la minoría", ha dicho durante la presentación oficial de la nueva Cámara de Comercio de España, donde ha reafirmado "con ilusión" el compromiso de los empresarios para constituir el sistema económico y el tejido empresarial que necesita España en los albores de siglo XXI.
Bonet ha querido hacer una "defensa cerrada" del sistema de valores que rige a los empresarios españoles y ha reivindicado el trabajo de miles de pequeños empresarios, autónomos y grandes multinacionales españolas.
"Debemos sentirnos orgullosos de nosotros y del papel social que cumplimos", ha subrayado, tras resaltar la necesidad de poner en valor su función social y dar un paso al frente para conseguir un sistema económico que llegue a todos.
Por otro lado, Bonet ha destacado la necesidad de impulsar la recuperación económica y ha subrayado el papel que jugará la nueva Cámara de Comercio en esta tarea, apostando por la mejora de la competitividad y la internacionalización de las empresas.
En este sentido, ha recordado que la nueva Cámara de Comercio es una institución nueva, pero heredada del anterior Consejo Superior de Cámaras y enraizada a larga historia de las Cámaras de Comercio como organizaciones que existen en casi todos países del mundo.
En España, según Bonet, las Cámaras han resurgido con la nueva ley, tras vivir tiempos complejos en los que no siempre han tenido una buena percepción por parte de las empresas. De hecho, el también presidente de Freixenet ha aprovechado para agradecer al Gobierno y a los grupos políticos el impulso de los últimos años y ha destacado la "fuerte legitimidad" política, histórica y geográfica con la que nace la nueva Cámara.
GRAN REPRESENTACIÓN EN LA CÁMARA.
Este nuevo organismo aglutina a los actores más importantes del mundo económico, con representantes de las grandes empresas del país, de los trabajadores autónomos, de las cámaras de comercio en el exterior y con una gran representación ministerial. Esta suma de actores, según Bonet, debe favorecer la excelencia en los proyectos de apoyo a las empresas.
Por otro lado, ha resaltado que el nuevo proyecto de las Cámaras se basará en la colaboración público-privada porque sólo desde la suma del trabajo común se alcanzarán los objetivos fijados.
"Es responsabilidad de todos conseguirlo", ha dicho Bonet, para quien sólo con las mejores empresas se puede dar respuesta a la globalización. A su parecer, España ha llegado tarde, pero cuenta con empresarios con ideas para hacerlo y sólo necesitan cierto impulso para poner en marcha sus proyectos.