El delegado especial de Zona Franca en Cádiz, Jorge Ramos, y el alcalde de Algeciras, José Ignacio Landaluce, se han reunido este viernes con empresarios de la Comunidad de Propietarios del Polígono Cortijo Real, encabezados por su presidente Alfonso Guisado, a los que informaron sobre el proyecto de reurbanización de este enclave industrial, que van a llevar a cabo conjuntamente Zona Franca y el Ayuntamiento de Algeciras.
Jorge Ramos explicó que paralelamente a esta reurbanización, el Consorcio gaditano trabaja en el proyecto de ampliación y expansión del Recinto Fiscal a terrenos de Cortijo Real, que tendrá una superficie de 130.000 m2, y que forma parte del ambicioso proyecto de expansión de la Zona Franca de Cádiz a distintos municipios de la provincia.
Los representantes de Ayuntamiento y Zona Franca coincidieron en señalar que la reurbanización del Polígono supondrá llevar a cabo un cambio radical y adecuarlo al futuro con el fin de conseguir un mayor dinamismo y que las empresas que allí están instaladas trabajen con mayor operatividad y comodidad.
Cortijo Real reúne actualmente a más de 250 empresas. En el proyecto de reurbanización, el Consorcio de la Zona Franca de Cádiz aportará el 70% del presupuesto necesario con recursos procedentes de fondos europeos destinados a la reindustrialización. El resto lo pondrá el Ayuntamiento de Algeciras a través de la aportación de los terrenos necesarios para ejecutar la actuación.
Ramos y Landaluce aseguraron que este polígono, una vez remodelado y cuya ampliación podría estar funcionando lo largo de 2016, y asociado a la actividad del puerto, convertirá a Algeciras en un gran polo de actividad económica de Andalucía.
Además de dar detalles sobre el proyecto de reurbanización, el delegado de la Zona Franca también explicó a los empresarios las ventajas que conlleva contar con un recinto fiscal y aduanero como el previsto, desde las perspectiva de que no aplica el IVA a las mercancías que se encuentran en su interior; y por el denominado Régimen de Perfeccionamiento Activo, que implica que determinadas transformaciones que sufren las mercancías no están sujetas a los impuestos que se aplicarían en el exterior. Así, se ofrecen unas condiciones objetivas para que las empresas sean más competitivas. “Estamos, en el camino acertado para incentivar la actividad económica y la riqueza que va aparejada al empleo”.