Muestras de apoyo a la enfermera culpada de la muerte de Rayan

El sindicato de enfemería Satse protagonizó ayer al mediodía una protesta a las puertas del hospital de Jerez en defensa de la profesional sobre la que ha recaído toda la culpa por la muerte de Rayan, en el Gregorio Marañón de Madrid. “Denunciamos públicamente las declaraciones del director gerente del hospital quien, inmediatamente, en rueda de prensa, acusa directamente al personal de enfermería calificando estos hechos como un terrorífico error profesional del personal de enfermería y de gravísima negligencia” , expusieron en el manifiesto colectivo que leyeron.
Igualmente, “requerimos una investigación rigurosa y exhaustiva, que analice todas las circunstancias que concurrieron para que tan lamentable hecho se haya producido. Como profesionales, asumimos plenamente la responsabilidad de nuestro trabajo, pero no vamos a permitir ningún intento de desprestigiar a nuestra profesión, en especial ante la sociedad, a la que transmitimos en estos momentos un mensaje de tranquilidad y confianza en sus enfermeras y enfermeros”.
Los enfermeros que secundaron la protesta subrayaron en el manifiesto su repulsa contra el que Ministerio de Sanidad y Política Social, “que no ha realizado una declaración formal que sitúe la realidad de los hechos y transmita su apoyo a la profesional afectada y a toda la profesión enfermera, olvidando la contribución de la enfermería española a la calidad y el reconocimiento que tiene nuestra Sanidad Pública en la Unión Europea y en el mundo”.
El sindicato añade que las condiciones en las que trabajan son muy deficitarias, con unas plantillas bajo mínimos, “sin que se sustituyan gran parte de las bajas y los permisos, con gran sobrecarga de trabajo que los gestores quieren que asumamos como algo normal en nuestro sistema sanitario y obligándonos, incluso en un mismo turno, a realizar nuestro trabajo en distintos servicios o unidades.
Satse solicita una plan de adecuación de las plantillas de enfermería al ratio europeo, que se ponga fin a la rotación “forzosa e indiscriminada” de los profesionales, protocolos de acogida y tutelaje de enfermeros, que se ponga freno al “abuso de la polivalencia de la enfermería” y un plan de prevención de riesgos laborales.