Manuel Infante, barbateño de nacimiento y de corazón afincado en Valdemoro, presenta su cuarto libro ‘…Y no dormir sin soñar’, un poemario con el que el escritor cambia de estilo tras las publicación de tres novelas ‘La llave del mar’, ‘El Guardián de las columnas’ y ‘Vías de Guerra’. Amante de la literatura y apasionado de la historia, en esta ocasión el escritor barbateño se atreve con la poesía. “Comencé escribiendo pequeños versos aunque pronto decidí practicar más la prosa por temor a encasillarse. Algunos amigos me pedían que les hiciera poemas para sus parejas, lo que me llenaba de orgullo”, cuenta Infante.
Ya en 2018 participó en un concurso de poesía quedando entre los diez primeros de más de 1300 participantes y “entonces me animé a escribir más poesía”.
Este poemario es un paréntesis en su trayectoria y ya anuncia que “volveré en el próximo a la novela, porque me siento más a gusto en ese género”.
Un poemario tras tres novelas ¿Por qué el cambio de género?
–Cada vez que decidí tomar un camino fue para recorrerlo todo lo posible. En la literatura hay varias sendas, a cuál más bonita. Esta vez partía con la ventaja de haber escrito poemas antes, pero existen otros géneros que también me gustaría tocar. Por ejemplo, aunque nunca escribí nada de teatro, me encantaría probar suerte alguna vez. Pienso que en la vida hay que ir superando retos. De lo contrario, nos estancamos y eso no me gusta nada.
¿Qué temáticas abordas en tus poemas?
–Un poco de todo. No podía faltar el puñetero Covid porque la mayor parte del poemario se gestó durante el confinamiento. Pero predominan mis dos temas favoritos a la hora de escribir: Mi tierra, a la que adoro y la mujer, a la que admito profundamente.
Si tuvieras que definirlo con pocas palabras y convencer a los lectores de que es una buena e interesante lectura, ¿Con qué palabras lo harías?
–Al compartir mis poemas en el muro de Facebook, me han dicho varias veces que digo lo que todos piensan, pero, con otras palabras. Se trata de eso precisamente, de comentar lo que todos hablan dándole un toque particular.
La portada, sin duda, tiene mucho significado, ¿Por qué?
–Reconozco que mi idea siempre fue la de poner como foto de portada la Torre del Tajo, pero un sabio consejo de mi amigo Manolo Valdés, que desde el segundo libro colabora diseñando mis portadas, me aconsejó que pusiera el Faro de Trafalgar y, por suerte, le hice caso, ya que el resultado es espectacular. En cualquier caso, siempre ilustré mis libros con fotografías de este rincón, así que ahora tenía que seguir con esa costumbre.
¿Qué esperas de esta publicación?
–Hay sentimientos que no se pueden quedar dentro. Y tampoco se pueden escribir de cualquier forma. Me apetecía compartirlos como yo los siento y por eso me empeñé en publicar este poemario.
¿Cuándo y dónde se presentará?
–De momento no voy a presentarlo, quizá en junio. El protagonismo ahora será de la primera edición de la Feria del Libro en nuestro pueblo, Barbate, y me parece bien que sea así. Lo que sí haré será estar firmando ejemplares en dicha feria.
Próximos proyectos: Ya habías avisado que volverías a la novela tras el poemario ¿Tienes ya idea del argumento?
–Sí, ya estoy trabajando en ese proyecto. Seguiré buceando en la historia en busca de tesoros y leyendas. Desde Almodóvar del Río, en Córdoba, hasta Ourense, se recorrerá gran parte de España. Será una intensa aventura para intentar resolver un enigma que nació hace varios siglos. No faltarán referencias a reyes importantes de nuestra historia, como Alfonso X. Todo ello con la presencia de magia, templarios y la aparición, por primera vez en mis libros, de un fantasma.