Así lo ha advertido el autor del método “huellas climáticas” en un encuentro con los medios celebrado ayer en la sede de la Fundación BBVA coincidiendo con la ceremonia de entrega de los premios que tiene lugar esta semana.
Hasselmann, que ha obtenido un premio dotado de 400.000 euros, ha subrayado que la construcción de una nueva economía más limpia es “una necesidad” por lo que “cuanto antes empecemos mejor”.
En este sentido, el matemático, nacido en Hamburgo en 1931, ha recordado que todos los avances tecnológicos “exigen inversiones antes de obtener beneficios”, y que en lo que se refiere al cambio climático, no realizar esas inversiones sería “más caro y peligroso a largo plazo”.
En este sentido ha apostado por propuestas como poner precio a las emisiones de CO2, determinar cuánto puede consumir cada persona y cada país y elaborar un sistema de máximos de emisión.
El físico ha asegurado, además, que la transición hacia una economía “limpia” no exige renunciar a los actuales estándares de calidad de vida, porque “tenemos tecnología para combatir el cambio climático y si se invierte en ella correctamente, podemos hacer frente al problema sin que afecte de manera importante a nuestra manera de vida”.
En esta línea, Hasselmann ha considerado que el “principal obstáculo” a la hora de combatir el cambio climático es que ni los ciudadanos ni los políticos son verdaderamente conscientes de que el problema “tiene solución”.